CIUDAD DE MÉXICO, agosto 20 (EL UNIVERSAL).- Ante el incremento de casos de maltrato infantil, discriminación, humillación, golpes, revictimización, daño a la intimidad, abandono, violencia sexual y homicidio, el Partido Verde en la Cámara de Diputados propuso reformar la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes para incluir el concepto de crianza positiva.
De acuerdo con la iniciativa, crianza positiva se define como «aquellas prácticas de cuidado, protección, formación y guía que posibilitan el desarrollo, bienestar y crecimiento saludable y armonioso, tanto físico como mental, espiritual, ético, cultural y social de las niñas, niños y adolescentes, gracias a que se realiza de acuerdo con la evolución de las facultades, la etapa del ciclo vital de desarrollo, las características y circunstancias de la niña, niño o adolescente, sin recurrir a la violencia, sino respetando sus derechos humanos».
El Informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), sobre los indicadores de la situación de niñas, niños y mujeres en México, en 2015 la mayoría de los hogares empleaba una combinación de prácticas disciplinarias violentas, lo cual era reflejo del deseo de los cuidadores de controlar la conducta de los menores de cualquier forma.
El documento señala que un 53% de los niños y niñas fueron sometidos a agresión psicológica, mientras que aproximadamente un 44% tuvo un castigo físico. Los golpes en la cabeza, las orejas o la cara, son en general los castigos físicos más comunes.
La diputada ecologista Eunice Monzón García, señaló que es indispensable cambiar el futuro de la infancia, ya que la violencia contra los infantes sigue incrementándose. A principios del 2022 las cifras eran alarmantes y se registró un aumento en este tipo de violencia, incluyendo el homicidio.
Sostuvo que ante ello, es urgente el fortalecimiento de los mecanismos para garantizarles justicia a los niños, niñas y adolescentes, así como la implementación de estrategias de prevención que atiendan las causas estructurales de la violencia.
Así mismo, añadió, es necesario el fortalecimiento de los vínculos y valores familiares, además de la implementación de la crianza positiva para evitar el castigo corporal y humillante.
«Se trata de reconocer la factibilidad de concentrar en una noción no sólo la prevención, la atención y el combate de toda forma violencia física o verbal, sino de poner a disposición de quienes ejerzan la patria potestad, tutela o guarda y custodia de niñas, niños y adolescentes un modelo de crianza de carácter indicativo -no limitativo- para el cuidado, protección y educación de los menores».
La propuesta busca también, establecer que corresponderá a las autoridades federales y locales de manera concurrente desarrollar el modelo de crianza positiva.