CULIACÁN, Sin., octubre 21 (EL UNIVERSAL).- El que le hayan puesto el rostro de una calavera a la enorme cabeza olmeca de dos metros y medio de altura, la cual hace un año fue reubicada al interior del Centro Cívico Constitución, en la capital del estado, generó severas críticas en las redes sociales y de investigadores, por considerar que se distorsiona los símbolos mexicanos.
Las autoridades municipales, a través del Instituto de la Cultura, justificaron el cambio del rostro por motivo de los festejos del Día de Muertos y consideraron que no se trata de una pieza ni patrimonio cultural, por estar diseñada de una mezcla de cartón y fibra de vidrio.
Esta cabeza olmeca, que fue diseñada desde hace más de una década y permaneció por varios años en una sección comercial del Parque del Centro Cívico Constitución, en el segundo cuadro de la ciudad, hace poco más de un año fue reubicada en la entrada principal.
Servando Rojas Quintero, director de la delegación del Instituto Nacional de Antropología e Historia, fue una de las voces que criticaron a las autoridades municipales haber modificado la imagen de este símbolo.
Pese a que las autoridades municipales expusieron que no se trata de una réplica, Rojas Quintero mencionó que no se pueden modificar las identidades de las imágenes que tienen que ver con las raíces históricas.