En Aguascalientes la gente le perdió de plano el miedo a la pandemia y más cuando las autoridades de gobierno dejaron como opcional el uso del cubrebocas aún con el enorme riesgo que representan los eventos masivos que presenta la feria, pues la demanda de pruebas de laboratorio cayó a su nivel más bajo desde la llegada del Covid-19 a la Entidad.
Según investigó HIDROCÁLIDO entre el personal del Laboratorio Estatal de Salud Pública y de los laboratorios privados con autorización para comercializar las pruebas diagnósticas, de hasta mil estudios que se llegaron a realizar y procesar en un día durante lo más álgido de la pandemia, ahora cuando mucho se están solicitando apenas medio centenar de test para descartar o confirmar el contagio.
Esto ha provocado que se estén reportando menos casos positivos y que de manera equivocada se pueda tener la sensación de que la pandemia ya está superada en el Estado, pero no es porque ya no haya más personas infectadas sino porque la gente dejó de demandar la prueba en los laboratorios públicos y privados, confiando en que por la vacuna ya no les pasará nada, explicaron especialistas del Laboratorio Estatal de Salud Pública.
Ahorita con la feria la gente está totalmente distraída y de hecho anda en la fiesta, por lo que su salud la deja en un segundo o tercer plano, por lo que aún con sintomatología no acude a hacerse la prueba y con ello lo único es que está comprometiendo su salud y la de la persona con la que convive de manera habitual, porque en caso de estar contagiado terminará infectando a más personas, siendo eso lo más preocupante debido a que como ya se dijo anteriormente, a final de cuentas los hospitales y el personal de Salud es quien terminará resintiendo las consecuencias de la nueva ola de contagios.
“Cada vez está viniendo menos gente al laboratorio a que se le haga la prueba del Covid-19 y de las pocas pruebas que son estudiadas, termina siendo mínimo el número de casos positivos, aunque hay que aclarar bien que eso no significa que no haya contagios sino que no se diagnostican ni tratan porque los infectados no saben que fueron contagiados, siendo eso lo que hace más difícil el control del problema sanitario”, mencionaron los laboratoristas.
Se aseguró que la realización de pruebas cayó a su nivel más bajo en los últimos dos años, pero se insistió que eso no se debe ni a que esté de salida la pandemia y tampoco a que no haya pruebas para aplicarse a la población, sino porque la gente ya no la solicita para descartar o confirmar el contagio.