México, 23 ene (EFE).- Cientos de migrantes cruzaron irregularmente este jueves el río Suchiate, frontera natural entre México y Guatemala, para adentrarse en territorio mexicano en grupo tras las escasa presencia de la Guardia Nacional.
Este es el segundo intento de migrantes centroamericanos que partieron la semana pasada de sus países de cruzar hacia México desde Guatemala.
El pasado lunes hubo un intento fallido, pues la Guardia Nacional impidió que centenares de ellos entraran irregularmente a México luego de que el Gobierno rechazara su petición de ingreso formal.
Según el Instituto Nacional de Migración (INM), alrededor de 500 se adentraron en territorio mexicano pero la gran mayoría fueron detenidos en las horas siguientes.
Este jueves, y tras varios días congregándose en varios albergues de la guatemalteca Tecún Umán, los migrantes cruzaron de nuevo el Suchiate en grupo.
Los migrantes -fuentes periodísticas hablan de hasta 2.000 personas- empezaron a congregarse sobre las 04.00 hora local (10.00 GMT) y alrededor de una hora después empezaron a cruzar el río en caravana, que tiene un cauce bajo, aunque lleva algo más de caudal que en días pasados.
Se estima que no lo hicieron por el cruce habitual y más cercano al puente Rodolfo Robles, sino que se alejaron algo de la ciudad y ahora avanzan en grupo por el suroriental estado de Chiapas, ondeando incluso banderas de sus naciones.
Apenas hay presencia de la Guardia Nacional, cuerpo militar-policial creado por el Ejecutivo de Andrés Manuel López Obrador que en días pasados impidió su entrada.
A mediados de enero miles de migrantes centroamericanos, en su mayoría de Honduras, empezaron un nuevo éxodo en caravana a fin de llegar a Estados Unidos.
Este fin de semana, centenares de ellos se agolparon en la frontera entre México y Guatemala. Principalmente en dos puntos, en el cruce tradicional de Tecún Umán (Guatemala) con Ciudad Hidalgo (México), separados por la frontera natural del río Suchiate, y por el puerto fronterizo El Ceibo, que une ambas naciones por el suroriental estado de Tabasco.
El sábado, el INM anunció que permitía el ingreso por grupos de 20, a quienes revisarían su condición migratoria.
Unas 1.000 personas entraron y fueron llevadas a estaciones migratorias y si bien se está evaluando su condición de asilo o la oferta de trajo, las autoridades migratorias informaron que la mayoría serían deportados.
Este miércoles, el INM informó que se detuvo a más de 2.000 migrantes centroamericanos en un día entre los estados de Chiapas y de Tabasco.
Horas después indicó que, con el apoyo de la Guardia Nacional, se había llevado a cabo la deportación de 460 hondureños.