Tegucigalpa, 8 oct (EFE).- La cifra de hondureños deportados entre enero y septiembre pasado, principalmente de Estados Unidos y México, disminuyó un 65,4 %, según cifras divulgadas ese jueves por el Observatorio Consular y Migratorio de Honduras.
Los datos oficiales consultados por Efe dan cuenta de que en estos nueve meses fueron deportados 31.321 hondureños, un 65,4 % más que las 90.649 personas retornadas en el mismo periodo de 2019.
Del total de hondureños retornados, 4.663 habían salido de su país como parte de una caravana que tenía como destino final Estados Unidos, señaló el organismo.
Estados Unidos, país con el que Honduras firmó en septiembre de 2019 una serie de acuerdos para reducir la migración irregular, deportó entre enero y septiembre a 12.593 hondureños, de ellos 1.320 niños y adolescentes, algunos no acompañados.
Las autoridades migratorias de México retornaron a Honduras, por vía aérea, a 11.052 migrantes hondureños indocumentados, incluidos 1.662 menores de edad.
Otros 7.147 hondureños, incluidos 922 menores de edad, fueron deportados también por las autoridades mexicanas vía terrestre, mientras que 529 nacionales fueron repatriados desde países centroamericanos, según el informe.
Los deportados por México representan el 58,1 % del total de casos, mientras que las deportaciones desde EE.UU. equivalen al 40,2 %.
Los menores de edad retornados en estos nueve meses del 2020 sumaron al menos 3.623 y representan el 11,6 % del total.
En Estados Unidos, según autoridades de Tegucigalpa, viven alrededor de un millón de hondureños, entre residentes legales e indocumentados, que han escapado de situaciones que afectan al país centroamericano como la violencia.
Una caravana migrante partió la semana pasada de Honduras con la intención de llegar, vía Guatemala y México, a Estados Unidos.
Este martes, el Instituto Nacional de Migración de Honduras indicó que había sido retornados a su país 1.495 migrantes desde Guatemala, incluidos 492 niños y adolescentes, de ellos 39 no acompañados.
Los migrantes, como en otras caravanas, una modalidad que se ha venido dando desde el 13 de octubre de 2018, adujeron que pretendían abandonar su país por la falta de empleo y la violencia, flagelos que se han agudizado por la crisis causada por la pandemia del coronavirus, que en Honduras ya deja 2.466 muertos y más de 81.000 contagios.
Los indocumentados que cruzan México con rumbo a Estados Unidos están expuestos a robos, extorsiones, secuestros e incluso asesinatos por parte de bandas criminales, así como a abusos de autoridades corruptas, según fuentes oficiales.