México, 9 oct (EFE).- La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció este viernes la reapertura de casinos y boleras, pero puntualizó que la capital continuará la próxima semana en semáforo naranja, es decir peligro alto de contagios de COVID-19.
«Tuvimos una reducción en la ocupación hospitalaria de casi el 9 %, del 15 al 30 septiembre. Hay una reducción pero no estamos en posibilidades de pasar a semáforo amarillo (peligro medio de contagios)», expresó la alcaldesa de la capital en conferencia de prensa.
Durante las últimas horas, se había sospechado que Ciudad de México podría declarar el semáforo amarillo, lo que implicaría pasar a una nueva fase epidémica con la reapertura de oficinas y grandes corporativos, algo que descartó por ahora la alcaldesa.
De todas formas, tras más de seis meses de cierre, Sheinbaum anunció que los casinos y las boleras podrán reabrir en la ciudad con aforos del 30 % y estancias máximas de una hora por persona.
También se obligará el uso de cubrebocas para entrar en los establecimientos y un buen sistema de ventilación, de la misma manera que se exige en otros negocios que ya reabrieron como los restaurantes.
Asimismo, Sheinbaum anunció que las tiendas del centro histórico de la ciudad, donde el plan de reapertura es más lento para evitar aglomeraciones de gente, ya podrán abrir los domingos.
Según datos del Gobierno local, la ciudad acumula 137.223 casos confirmados de COVID-19 y 13.837 decesos, y registra 2.590 personas hospitalizadas, de las cuales 675 están intubadas en terapia intensiva.
Las autoridades sanitarias de México notificaron 5.300 nuevos casos y 370 muertes por COVID-19 este jueves para sumar 804.488 contagios y 83.096 muertes desde el inicio de la pandemia de coronavirus SARS-CoV-2 en febrero pasado.
La Ciudad de México representa por sí sola el 17 % de todos los casos.
El país cerró la economía no esencial durante los meses de abril y mayo, si bien la cuarentena en el hogar no fue obligatoria, y en junio inició un lento plan de reapertura basado en un semáforo de color rojo, naranja, amarillo y verde, en función de la situación epidemiológica.
México es el cuarto país del mundo con más muertos por la pandemia, por detrás de Estados Unidos, Brasil y la India.