CIUDAD DE MÉXICO, marzo 2 (EL UNIVERSAL). –
Pifias, mantas, insultos, pleito por un micrófono y hasta arañazos se presentaron en la sesión de este jueves en el Congreso de la Ciudad de México.
Todo comenzó cuando la diputada de Morena, Marcela Fuente, presentó un punto de acuerdo para exhortar a la alcaldesa de Álvaro Obregón, Lía Limón, a informar sobre el contrato que supuestamente su administración celebró con la empresa ABC Estudio S.A. de C.V., para rehabilitar un inmueble de protección civil, pues la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó varias irregularidades.
Este punto se consideró de urgente y obvia resolución. Lo que la diputada de Morena ignoraba, porque solo leyó el encabezado de una noticia en donde se informaba de esta irregularidad, es que este contrato se firmó en la administración de Layda Sansores.
Desde tribuna, la diputada del PAN Claudia Montes de Oca exhibió a los morenistas por este error.
«Este contrato por casi 13 millones de pesos que se adjudicó a la empresa ABC Estudios S.A. de C.V., que fecha creen que es: el 21 de mayo de 2021, durante la gestión ni más ni menos que de nuestra gobernadora de Campeche, Layda Sansores, eso significa que las irregularidades que bien denuncian en este Punto de Acuerdo Morena, son irregularidades que se dieron durante la administración morenista de la alcaldesa en ese entonces, Layda Sansores», apuntó.
La cara de sorpresa de los morenistas fue evidente ante este error que cometieron, mientras que las panistas exhibían mantas con la leyenda: «Morena exhorta a Layda a rendir cuentas».
Además, las panistas también exhibieron otro error que cometió el diputado de Morena, Carlos Cervantes, al presentar un punto de acuerdo hace algunos meses en contra de la alcaldía Benito Juárez, pues la confundió con el municipio de Benito Juárez, en Quintana Roo.
Daniela Álvarez, de la Asociación Parlamentaria Ciudadana, atizó la pifia de los morenistas también desde tribuna. «Sé que ya se señaló la fecha del contrato, pero tenemos problemas de comprensión, entonces me parece que es importante señalarlo y mencionarlo, una y otra y otra vez».
Panistas vs Morenista por el micrófono. Ante el desconcierto generado y las burlas, el presidente de la Mesa Directiva, Fausto Zamorano, llamaba al orden y respeto, pero nadie hacía caso. Fue en ese momento cuando la diputada panista Gabriela Salido pidió una moción de ilustración a la Mesa Directiva y solicitó que se leyera la parte de una versión estenográfica de una sección pasada y dijo: «veo que no hay secretaría, puedo subir yo».
Ni tarda ni perezosa, y animada con las porras de sus compañeros, subió a la tribuna y ocupó el lugar de la secretaria en la Mesa Directiva, en donde existe un micrófono. En ese momento, las morenistas llamaron a Marcela Fuente para que asuma su función de secretaria, pero que ahora no hacía porque ella era promovente del punto de acuerdo.
La morenista también subió a la tribuna, se sentó en medio de Gabriela Salido y del presidente de la Mesa Directiva y le arrebató el micrófono a la panista. En ese momento, también subió Ana Villagrán y Daniela Álvarez para proteger a Salido y quitarle el micrófono a Marcela Fuente.
Quien se sumó al pleito fue Circe Camacho, del PT, quien también intentó arrebatar el micrófono, agarró por el brazo y arañó a Ana Villagrán.
Fue ahí cuando todo se descontroló, pues también llegó la panista Luisa Gutiérrez para encararse con Circe Camacho, y algunas diputadas que se encontraban inmiscuidas en la lucha encarnizada por el micrófono empezaron a sacar video para documentar el momento.
Todo esto pasaba mientras Fausto Zamorano estaba atónito y para calmar las aguas pidió un receso.
Tras el receso y luego de percatarse de su error, los diputados de Morena pidieron corregir el punto de acuerdo, pero cambiaron más del 70% del texto, lo que enojó a los panistas y priistas. Tras varios minutos interminables de debate de si era correcto o no cambiar los resolutivos y el texto del punto de acuerdo, la presidencia de la Mesa Directiva ordenó que se votará si era de aprobarse o no.
Ante esto, y porque Morena le quitó todo lo que inmiscuía a Layda Sansores para querer embarrar a la actual alcaldesa, Lía Limón, los panistas anunciaron que no votarían, por lo que se retiraron y la sesión se reventó por falta de quórum.