Un grupo de 10 congresistas estadounidenses pidieron a la titular de la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR por sus siglas en inglés), Katherine Tai, involucrarse con el tema la posible aprobación del paquete de reformas constitucionales en México a fin de evitar que vayan en contra de las obligaciones y compromisos que se establecieron en el T-MEC.
Los legisladores de Estados Unidos pidieron también a la administración de Joe Biden que fije la postura en torno a las reformas constitucionales en México en torno al sector energético, minero, maíz transgénico, la desaparición de los organismos autónomos y la reforma judicial.
En una carta, los congresistas liderados por el presidente del Subcomité de Comercio de la Cámara de Representantes, Adrian Smith, afirman que, reconociendo el respeto a la soberanía de cada país, consideran que «muchas de las reformas propuestas parecen comprometer el acceso de los inversionistas de Estados Unidos a un marco regulatorio estable, predecible e imparcial».
Reformas socavarían la competitividad de América del Norte, alertan
Dicen estar preocupados por las prohibiciones del gobierno mexicano para limitar ciertos métodos de extracción, exploración de litio, restringir algunas operaciones y permisos a los particulares en la industria eléctrica, y prohibir las importaciones de maíz genéticamente modificado, así como proponer la desaparición de los órganos autónomos.
«Esas políticas socavarían la competitividad de América del Norte y crearían un entorno desafiante para las empresas relevantes que buscan operar bajo las reglas del T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá) en México», expuso.
Congresistas preguntan a gobierno de Biden su posición sobre reformas en México
Ante la proximidad de la discusión de las reformas, los congresistas piden a la USTR actuar lo más pronto para contactar al gobierno mexicano a fin de asegurar que las preocupaciones de las partes interesadas sean adecuadamente comunicadas.
Además, los congresistas, Ron Esteves, Jim Costa, Grega Stanton, Jodey C. Arrington, Beth Van Duyne, Mike Carey, Michelle Steel, Claudia Tenney y David Schweikert, afirmaron que ante la proximidad de la revisión del acuerdo comercial en 2026 «cualquier acción que contravenga a las obligaciones del T-MEC creará dudas significativas con respecto a los compromisos y objetivos compartidos e inevitablemente harán que el proceso de revisión sea más difícil».
Los representantes estadounidenses también piden se les contesten seis preguntas antes del 20 de septiembre en torno a la posición del gobierno de Biden a las reformas constitucionales de México, sobre cómo impactarán el T-MEC, cómo se defenderán los intereses de los estadounidenses, si ya hubo contacto con el gobierno para platicar sobre las reformas constitucionales y la estrategia de largo plazo para proteger el acceso a los mercados de la industria estadounidense a México, entre otras.