CIUDAD DE MÉXICO (EL UNIVERSAL).- Los socios de la Cooperativa Cruz Azul lamentaron y condenaron enérgicamente los hechos de violencia llevados a cabo la madrugada de este miércoles en la planta productora de cemento ubicada en el municipio de Tula de Allende, estado de Hidalgo.
«A este respecto es imperativo aclarar que en todo momento, nuestras acciones en contra de Federico Sarabia y quienes hasta el día de hoy mantienen retenida ilegalmente la planta, se han llevado a cabo por la vía legal, privilegiando los canales institucionales, la certeza jurídica, pero sobre todo, la integridad física de sus ocupantes», señalaron en un comunicado los socios de la Cooperativa.
Por el contrario, indicaron que este grupo disidente, además de ostentarse como presidentes de los Consejos de Administración y de Vigilancia, le han permitido el acceso a grupo de vándalos ajenos a las instalaciones, «agrediendo y poniendo en riesgo a la comunidad».
Enfatizaron que de parte de quienes integran de manera legal y legítima la Cooperativa, en ningún momento se ha considerado la violencia como una opción para restituir al patrimonio y toda acción emprendida en el pasado, se ha llevado a cabo con el apoyo de las autoridades. «En Cooperativa Cruz Azul, tenemos la firme convicción en nuestras instituciones y consideramos que la violencia solo engendra más violencia. La ilegalidad siempre será la principal fuente para la inestabilidad social, la falta de certeza y todo tipo de hechos reprobables como los sucedidos la madrugada de este día», puntualizaron.
A raíz de lo anterior, los socios y trabajadores de esta Cooperativa, solicitaron la oportuna intervención de las autoridades competentes para investigar, deslindar responsabilidades y sancionar a los responsables de tan lamentables sucesos, así como para dar fin a la legalidad que persiste aun en la planta de Tula y traer el orden y justicia las comunidades.