Aguascalientes, Ags.-La inseguridad también le está pegando a los feligreses, pues debido a la ola de robos a las alcancías, bolsos de las mujeres y de las mismas imágenes y artículos religiosos, los templos y capillas ahora permanecen cerrados mientras no haya celebraciones programadas.
Los sacerdotes y custodios han dispuesto que esta medida de protección se aplique sobre todo en parroquias, templos y capillas ubicados en zonas con alta incidencia de atracos, toda vez que a los ladrones les ha dado por ingresar a esos sitios con la intención tanto de robar los bolsos de las señoras que acuden a orar, como de hurtar el dinero de las alcancías donde se depositan las limosnas e incluso de hacerse de algunas imágenes y cuadros religiosos que luego buscan malbaratar en el mercado negro.
“Se nos ordenó mantener cerrado el templo la mayor parte del día y sólo abrirlo minutos antes de las misas programadas, a fin de no ser víctimas de la delincuencia que está desatada y que ya no respeta nada ni a nadie”, señalaron personas encargadas de asistir a los sacerdotes y de cuidar capillas y templos ubicados tanto en la Zona Centro como en las colonias de Las Flores, Gremial, San Marcos y de la Estación.
En la Medallita Milagrosa, ubicada sobre la avenida General Barragán, no sólo la parroquia principal, sino también el área de las criptas, permanecen cerradas la mayor parte del día, debido a que no han sido pocas las ocasiones en que los ladrones han ingresado para hacer de las suyas, tanto con personas que acuden a orar como con las imágenes y hasta con las letras de los nombres de las personas que descansan en esos lugares.
El cierre de los templos mientras no haya ceremonias es una medida que está a criterio de los encargados de los recintos, pero lo que se está viendo es que la medida prácticamente se ha generalizado, ya que incluso hay algunos períodos del día en que también Catedral se cierra, precisamente para no correr riesgos con las visitas desagradables de personas que acuden sólo a robar lo que encuentren.
En los recintos religiosos donde se decidió cerrar las puertas fuera del horario de las misas y rosarios programados, las puertas de los mismos se abren con algunos minutos de anticipación al inicio de las ceremonias.