CIUDAD DE MÉXICO, febrero 27 (EL UNIVERSAL).
La tarde de este martes, la Junta de Coordinación Política (Jucopo) instaló el grupo de trabajo para el seguimiento al proceso electoral para visibilizar las agresiones y amenazas del crimen organizado a los candidatos que participen, así como toda intromisión de cualquier gobierno en la elección, sin importar el partido político que represente.
Los integrantes condenaron la participación e interferencia del crimen organizado en los procesos electorales, y señalaron que el crimen organizado se ha convertido en el principal enemigo de la democracia, y busca apoderarse de la elección del 2024.
También advirtieron que pareciera que el crimen organizado trata de crear el caos en la elección concurrente de este año, para invalidar el resultado de las votaciones.
El presidente de la Jucopo, Jorge Romero, especificó que el grupo de trabajo no pondrá atención a una elección en particular, sino a todo el proceso electoral en el país; pero «no se trata de convertirlo en una arena, se trata de defender a los hombres y mujeres que tengan una aspiración legítima y a quienes quieran ir a votar».
«No puede ser posible que sigamos en un país, donde poderes fácticos están diciendo, en los hechos, tú si vas y tú no, así de simple. Y si ya te dije que tú no vas e insistes, entonces, me estás desafiando y entonces soy capaz, como grupo fáctico, de atentar letalmente contra ti. Estamos en un esquema en donde si desafías esas decisiones, entonces, lo que te estás jugando ya no es una diputación, ya no es una alcaldía, ya te estás jugando la vida», dijo.
Por su parte, Francisco Huacus, coordinador del PRD, añadió que es indispensable que el Estado garantice los derechos de reunión pacífica y asociación, así como la libertad de opinión y expresión, porque debe aceptarse «que el crimen organizado se ha inmiscuido en las decisiones políticas del país, la inseguridad y la violencia siguen siendo la principal preocupación de nuestra nación».
«Resulta irrenunciable que los próximos comicios sean sometidos por el miedo y la impunidad que transitan con absoluta libertad en el país. Lamentablemente, la violencia ha difuminado las garantías constitucionales de los ciudadanos, vemos con terror y con temor e incertidumbre la injerencia abierta de grupos delictivos, que pretenden incidir y atemorizar, tanto a los ciudadanos, como a candidatos durante esta elección. Peligra la estabilidad política en este periodo de elecciones, tal parece que es crear el caos para invalidarlas», refirió.
El coordinador del PRI, Rubén Moreira, expresó que la ciudadanía debe decidir libremente por quién votar en esta elección, «sin una pistola en la cabeza, con la posibilidad de que pasen los candidatos, casa por casa, a entregar su propaganda, con la posibilidad de que no los maten», abundó.
«El mayor enemigo que tiene la democracia mexicana es el crimen organizado, básicamente, en su versión narcotráfico, pero hay otros que impiden en muchos lugares que haya elecciones como deben ser», afirmó.
En su intervención, Ignacio Mier, coordinador de Morena, pidió dejar el debate político-electoral de lado, para que el trabajo del grupo funcione; «la discrepancia normal de todo proceso, guardada en las curules para el debate en el pleno, y también reservada en las manifestaciones que en lo individual nosotros expresemos para no contaminar».
«Yo diría que no hay que perder, sin renunciar a nuestra apreciación, valoración crítica, debate que puede estar ciertamente acompañado de suspicacia política, no hay que olvidar cuál es el propósito del grupo», dijo.
La diputada Ivonne Ortega Pacheco, en representación de Movimiento Ciudadano, señaló que el crimen organizado no debe, por ninguna vía, apoderarse de una elección, y que el Poder Legislativo no puede ser omiso ante la realidad del país.
«Si hay miedo, no puede haber democracia, si hay fraudes y complicidades y opacidad electoral, no puede haber democracia. No podemos tapar el sol con un dedo, lo que ocurre en el país es grave y se debe atender con urgencia, votar entre las balas no es democracia, el pueblo de México no merece una elección histórica marcada por la sangre y el miedo», añadió.
A nombre del PT, el diputado Benjamín Robles solicitó al grupo de trabajo que no olvide su tarea fundamental, que es de observancia, de coadyuvar y, «cuando sea necesario, hacer los señalamientos».
«No podemos minimizar el hecho de que algunos aspirantes a cargos de la elección popular han perdido la vida, se establece que, por manos del crimen organizado, y nosotros no podemos quedarnos cruzados de brazos», comentó.
Finalmente, la diputada Karen Castrejón Trujillo, en representación del PVEM, dijo que es necesario asegurar que el proceso electoral se desarrolle en condiciones de civilidad política y que transcurra en paz.
«Estas conductas no solo socaban la legitimidad de los resultados, sino que también atentan contra los cimientos mismos de la democracia. Cuando los ciudadanos se sienten amenazados o coaccionados en su derecho al ejercer su derecho al voto, es ahí donde buscamos que se incremente esa participación ciudadana», advirtió.