- El jueves 5 de noviembre el Obispo José María de la Torre Martín fue internado tras claros síntomas de Covid-19. Primeras versiones afirmaron que había sido llevado a Star Médica.
- El viernes 6, luego de múltiples críticas, se dio a conocer que sería llevado al Hospital Hidalgo.
- Ese mismo viernes los médicos encargados se dieron cuenta del mal estado de salud del prelado por la baja oxigenación en su sangre, por lo que recomendaron una intubación, misma que se llevó a cabo esa misma tarde.
- Hasta el domingo 8 de noviembre se hizo público por parte del Obispado el mal estado de salud del Obispo y su necesaria intubación traqueal. Los rumores se dispararon.
- El lunes 9 de noviembre comenzaron a surgir rumores del fallecimiento del Obispo, mismos que fueron desmentidos por el Obispado. Mientras ello sucedía, los médicos se vieron obligados a llevar a cabo una hemodiálisis por complicaciones renales.
- Ese mismo lunes por la tarde, los médicos detectaron fallos en los pulmones, por lo que trasladaron al Obispo de forma urgente al área de Terapia Intensiva del Hospital Hidalgo.
- Tras cumplir más de 20 días bajo procedimientos médicos, y luego de múltiples complicaciones, se le practicó una traqueostomía con el objeto de mejorar la ventilación a los pulmones.
- Tres días después de la traqueostomía, el cuerpo médico dio a conocer que ésta no había generado los efectos positivos para el prelado, por lo que su salud se deteriora de forma exponencial
- El 5 de diciembre se suspende la hemodiálisis, tras cumplirse un mes de hospitalización
- El 8 de diciembre se da a conocer que, a pesar de la mejoría en la mayor parte de sus órganos internos, no es posible extubarlo por la presencia de flemas que le impedían respirar de forma autónoma.
- El 14 de diciembre, a las 13:35 horas, se dio el fatal desenlace. Poco después de las dos de la tarde se dio a conocer el fallecimiento del Obispo de la Diócesis local, José María de la Torre Martín. Las campanas de todas las iglesias y parroquias, incluyendo la catedral de San Juan de los Lagos, Jalisco, repicaron a muerto para dar a conocer el desenlace a los feligreses.