Meghan Markle le dio la bienvenida a sus 43 años, una edad que la sorprende rodeada del amor de sus amigos y la familia que construye día a día junto al príncipe Harry. Sin embargo, aún con todas las cosas por las que puede celebrar, el cumpleaños de la actriz se vio empañado por una desagradable noticia que afecta directamente sus intereses económicos.
El fin de semana que Meghan y Harry planeaban dedicar enteramente a celebrar el cumpleaños de la artista, pero un atropellado incidente interrumpió su felicidad luego de que se reportara que el estudio de pilates que comparte con Heather Dorak, su mejor amiga, fuera vandalizado por personas que aún no logran ser identificadas.
Los detalles de este alarmante episodio fueron compartidos por la co-propietaria del negocio, quien a través de redes sociales detalló que el sábado por la mañana, al dirigirse al local, se percató de que las ventanas y puertas estaban completamente destrozadas.
«Afortunadamente, todos están bien, pero estos momentos son muy difíciles para cualquiera que sea dueño de un negocio», explicó la socia de Markle, quien a pesar de que omitió dar mayores detalles, probablemente para no intervenir con las indagaciones pertinentes, insinuó que se trata de un grupo de vándalos que ya han atacado en otros emprendimientos de la zona.
Cumpliendo con su palabra de no querer rodearse de lujos y vivir entre opulentos eventos, Meghan Markle decidió festejar su cumpleaños número 43 con una discreta reunión alejada de las excentricidades que pudieron haber gozado formando parte de la familia real británica.
De acuerdo con diversas fuentes cercanas al controvertido matrimonio, los duques de Sussex serán anfitriones de una pequeña comida en su casa de Montecito, lugar de California que desde hace un par de años eligieron para criar a Archie y Lilibet, sus hijos, a miles de kilómetros del rey Carlos y el príncipe William.
Ahí, el autor y la actriz degustarán una barbacoa, que se dice, será preparada especialmente por Harry para su amada esposa. Además, contarán con la compañía de algunos de sus amigos y Doria Markle, la mamá de Meghan, que ahora mismo, es la única que tiene contacto con ellos, pues continúan la distancia y los problemas con su padre.