Miguel de la Madrid metió a la cárcel al Negro Durazo y se legitimó, Carlos Salinas metió a la cárcel a «La Quina” y se legitimó, Ernesto Zedillo metió a la cárcel a Raúl Salinas y se legitimó, Peña Nieto metió a la cárcel a Elba Esther Gordillo y se legitimó, poco tiempo, pero se legitimó.
Pues parece que Andrés Manuel López Obrador los va a superar a todos y meterá a la cárcel ni mas ni menos que a Enrique Peña Nieto. A su antecesor, a aquel con el que habría pactado impunidad por no haber intervenido en la elección de la que resultó electo.
Estamos muy probablemente en el preludio de lo que será el mayor proceso anticorrupción en la historia de México y que podría llevar a prisión a un ex-presidente. Nunca en la historia un ex-presidente de la República ha pisado una prisión.
Se les ha investigado, se les ha condenado incluso en primera instancia (a Luis Echeverría por ejemplo), pero jamás uno ha estado tras las rejas.
Por más mala que esté siendo la gestión de la pandemia y de la crisis económica, ¿se imaginan el golpe mediático y político que tendría entre la opinión pública, entre el electorado, entre los incautos e incluso entre muchos de los adversarios de AMLO, la captura de Peña Nieto?
Con Lozoya en México dispuesto a cantarlo todo, con los nuevos videoescándalos bajo su poder, con la Fiscalía General de la República también bajo su poder, y lo más importante, antecedido por uno de los sexenios más corruptos de la historia, imaginen ustedes el margen de maniobra que tendrá a partir de hoy López Obrador para controlar todavía más la agenda política de México. Porque tiene no sólo la posibilidad de hacer historia encarcelando a su antecesor, sino también la oportunidad, si así lo quiere, de aniquilar a otros enemigos suyos, como los panistas, para que le dejen el camino libre para las elecciones que vienen y para las que vengan después.
¿Se aventará ese tiro el presidente?
Porque no se está metiendo con cualquier tipo de enemigos. Será muy el presidente, pero muchos de esos nombres que hoy están sudando la gota gorda tienen una enorme influencia e intereses muy grandes y no sé qué sean capaces de hacer para evitar ser tocados.