También en Aguascalientes sucede, los llamados “paracaidistas” se acomodan cerca de arroyos, ríos o incluso colinas, pero debido a las lluvias el terreno tiende a remojarse, por lo que se tiene que desalojar a las personas para evitar accidentes mayores.
Estos casos se han detectado en el ejido cumbres, donde las mismas personas llegan, construyen y se quedan a vivir. Por lo anterior, elementos de Protección Civil, de la mano de Conagua, trabajan para retirar a las personas que se asientan en estos lugares, pues al momento han logrado despejar el arroyo que ya había sido invadido.
En ese mismo sentido, Eduardo Muñoz, director de Protección Civil municipal, dio a conocer que se están monitoreando cerca de 100 viviendas muy antiguas que están dentro del primer cuadro de la ciudad y que fungen como restaurantes, antros y bares, con la finalidad de pedir un dictamen estructural a los renteros o dueños para que manifiesten el estado de estos edificios y evitar riesgos mayores, si bien año con año se deben realizar estos peritajes para detectar cualquier situación inminente de riego, y añadió que actualmente ya se tienen catalogadas 30 de estas casas que están más susceptibles a sufrir algún percance, por lo que se estarán monitoreando más de cerca.
El funcionario informó que el martes pasado se hizo la demolición del edificio que estuvo ubicado en la calle Matamoros en su cruce con Nieto, ya que debido a las lluvias pasadas se encontraba muy remojado, y después de sufrir derrumbes internos finalmente colapsó el techo, por lo que se pidió los permisos y se expuso ante el INAH para su autorización.