Habría que esperar hasta la segunda quincena del mes para determinar si la cuesta de enero como tal afectó a los comercios o es el desajuste en la producción de algunos proveedores, quienes dejaron de fabricar o se quedaron sin mercancía, justamente por las ventas de diciembre, consideró el presidente de la CANACO, Miguel Ángel Breceda Solís, quien destacó que los comercios no han registrado una caída tan fuerte en las ventas como para cerrar las cortinas en este año.
“En todos lados hay un retroceso de la cuestión económica en enero, precisamente por el exceso de compra, oferta, demanda que hay en diciembre, sin embargo, creo que difícilmente va a a haber el cierre o la extinción de negocios a nivel masivo; probablemente puede existir que alguno que otro cierre derivado de la situación de que el mercado no haya tenido los suficientes productos que vende, o en su caso, un servicio que no esté bien proporcionado, pero lo importante aquí es que si no tienen el producto no lo venden”.
Por ejemplo, dijo al respecto de algunas marcas, que se ha generado escasez del producto por la sobredemanda que se presentó en el pasado mes de diciembre, y que se comenzará a surtir en el mes siguiente, “esto no es una cuestión de la falta de compromiso del comerciante en vender, sino que esté escasa la mercancía a nivel de producción, no a nivel de ventas”.
El productor pudo haberse dedicado a generar mucha mercancía o productos en diciembre y ahora en enero puede que haya habido un retroceso.
Aseguró que para proveer se puede generar el lapso de los 30 días que es en los que se presenta la cuesta de enero.
“Habría que ver cómo se comporta el mercado en la segunda quincena de enero, pero en la primera sí habrá escasez de algunas cosas, pero yo creo que en la segunda quincena se va a recuperar”.
Puede ser que la cuesta de enero se vea dañada porque hubo una falta de producción de mercancía y por lo tanto, los vendedores no tienen la capacidad para poder hacer la venta.
Expresó que por lo que se ve, el consumo no se ha decaído tanto porque los centros comerciales de la periferia se atiborran desde el jueves, y así sigue viernes, sábado y domingo.
Los comercios en esas zonas de la ciudad, sobre todo los viernes, están repletos, pero se tendrá que esperar a que termine la primera quincena del mes para ver el comportamiento real del mercado y esperar a la segunda quincena, donde ya se podría hablar de los efectos de la cuesta de enero, dijo.