Denver (CO), 27 ago (EFE News).- Decenas de agentes federales y policías locales detectaron y luego destruyeron una masiva plantación ilegal de marihuana en el oeste de Colorado, presumiblemente conectada con los cárteles mexicanos de la droga, informó este jueves la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA).
Según Steven Knight, agente de la DEA a cargo de las operaciones, fotografías satelitales contribuyeron a detectar la plantación cerca de la localidad de Rifle, casi 300 kilómetros al oeste de Denver.
En rueda de prensa, Knight calificó la plantación de «una muy grande» y «la más grande (que la DEA) ha visto este año».
En el lugar (que ocupaba tanto terrenos públicos como privados junto a un embalse) las autoridades hallaron 16.000 plantas con un valor estimado en 7,5 millones de dólares. Además, seis hombres hispanos fueron detenidos, aunque sus identidades y nacionalidades no se dieron a conocer.
Knight indicó que espera que alguno de ellos coopere con las autoridades y «dé información», pero, incluso si no lo hacen la DEA cuenta con «algún tipo de evidencia electrónica» que se usará «para determinar quién más está detrás de esto».
El operativo federal comenzó el martes por la mañana y duró 48 horas. Además de la DEA participaron agentes del FBI, del Buró de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) y del Servicio Forestal de Estados Unidos, entre otras agencias.
A nivel local, se sumaron equipos especiales de la fuerza antridrogas de Colorado, alguaciles del condado Garfield, policías de Rifle, agentes del Buró de Investigaciones de Colorado y miembros de la Guardia Nacional de este estado.
Por la cantidad de plantas y la erosión causada en el lugar, así como por el daño ecológico al medioambiente, Knight estimó que la plantación ahora desmantelada estuvo activa «durante varios años».
«No sabemos exactamente durante cuánto tiempo, pero parece que algunos de los cultivos fueron repetitivos; es decir, ya estaban allí desde mucho antes (de que las imágenes satelitales detectasen el lugar)», declaró.
La plantación quedó ahora acordonada y custodiada «para evitar que alguien del público llegue sin querer» debido a la alta toxicidad del lugar por los fertilizantes y los pesticidas que se usaban para los cultivos.
Durante los próximos días, además de la limpieza del lugar, expertos removerán un sistema de riego no autorizado que desviaba agua de un arroyo local para usarla en la plantación.
Knight sostuvo que, por el tamaño y complejidad del cultivo, esta plantación era parte del mercado negro de marihuana conectado con los cárteles mexicanos. «En este caso, el dinero se hubiera ido al sur», comentó.
Pero también tiene que haber existido ayuda local para determinar el lugar exacto para iniciar un cultivo, que pudo mantenerse escondido durante años, con amplio espacio y agua suficiente. Investigar todos esos detalles, dijo Knight, «es mucho trabajo».
«Es una labor intensa. Es una operación grande y se necesitan muchas personas para realizarla. Ninguna agencia lo puede hacer por sí misma», concluyó.