Tras su participación en el Parlamento Abierto de Mujeres con el tema del desarrollo económico y los derechos humanos, Gwendolyne Negrete Sánchez, presidenta de la Asociación Civil Jefas de Familia, aseguró que la primera violencia que se puede estar recibiendo “es que te ignoran y las diputadas no estuvieron presentes, estuvieron ignorando todo el tiempo el Parlamento. Los trabajos que se estuvieron haciendo por parte de las organizaciones de la sociedad civil, solicitamos atentamente que fueran vinculatorios a los trabajos del Congreso”.
Negrete dijo que “de nada sirve ir a presentarnos ahí, con propuestas muy interesantes, todas, si no iban a estar presentes escuchándolas, decidieron ser omisas y retirarse. Y eso aparte de que es una gran falta de respeto, una gran falta de compromiso, una gran irresponsabilidad, es una violencia”.
Señaló que ni los diputados ni las diputadas se quedaron a los trabajos, “no se quedaron, una vez que instalaron la mesa se retiraron y nos dejaron solas. Estuvo el personal, porque bueno, es su trabajo, apenadísimos con todo esto, pero las y los diputados se retiraron, el único que estuvo presente desde un principio fue Cuauhtémoc Escobedo, después llegó el diputado Silva Perezchica y al último Juan Carlos, con cámaras, para que todo mundo se diera cuenta que estaba ahí y así no es el tema. Ahí no era para lucirse, era para escuchar y escuchar bien lo que las asociaciones civiles y la sociedad en general está solicitando, entonces, muy lamentable la violencia que ejercieron las diputadas a las mujeres que estuvieron presentes hoy en el Congreso”.
Además, dijo que fue una grave descortesía, “el mínimo de educación y decoro debiera haberlas dejado quedarse, y si no podían quedarse todas, irse turnando, pero ese día estaba destinado para que estuvieran ellas presentes, para que no agendaran nada y se quedaran justamente trabajando con nosotros, no les quitaríamos más que dos horas de su valiosísimo tiempo, si es que lo tuviesen”.
“Hice hincapié en esa violencia y esa omisión y esa falta de respeto que estuvieron haciendo las diputadas y los diputados, por supuesto, y como ellos dijeron, no se nos permitió participar porque dijeron que esto es cosa de mujeres, y eso no es cosa de mujeres, es cosa de la sociedad. Como sociedad, son hombres y mujeres los que participan”.
Además, se mostró muy decepcionada de la situación vivida en el Congreso ayer, “y pues ellas ya están ahí, ya llegaron al puesto de poder y toma de decisiones que por muchos años las mujeres estuvimos pugnando y peleando para que sucediera. Ya llegaron, ¿y ahora qué están haciendo a favor de las demás mujeres? Esto es una vergüenza, una gran falta de respeto, pero sobre todo, una violación a los derechos políticos que estamos ejerciendo al estar ahí presentes, una violación totalmente a todo y una violencia indescriptible”.
MAD