Los Ángeles.- El bateador emergente Will Smith conectó jonrón de tres carreras sólo horas después de ser llamado de los menores y los Dodgers de Los Ángeles derrotaron 6-3 a los Rockies de Colorado, en un juego en el que una mujer resultó golpeada en la cabeza por una bola.
Los líderes Dodgers llegaron a seis victorias consecutivas, ponen su marca en 54-25 y se mantienen en el primer lugar de la División Oeste de la Liga Nacional. Smith (3) mandó la pelota a la calle en la novena entrada, con dos corredores por delante, y selló la victoria de los Dodgers.
Fue el tercer día consecutivo en que un novato de los Dodgers conectó jonrón, todos contra los Rockies, la primera vez que sucede en la historia de las Grandes Ligas.
Matt Beaty conectó vuelacercas de dos carreras en la novena entrada el viernes, y Alex Verdugo lo hizo en la undécima entrada el sábado.
En la lomita la victoria correspondió al cerrador Kenley Jansen (3-2) en una entrada.
Por los Rockies la derrota la cargó el cerrador Scott Oberg (5-1) en dos tercios de episodio.
En la primera entrada, la estrella de los Dodgers, Cody Bellinger, golpeó una bola de foul que golpeó a una joven en la cabeza y fue llevada a un hospital para pruebas de precaución.
La mujer estaba sentada a cuatro filas del campo hasta la primera línea de base, más allá de la red de protección que se extiende hasta el final del dugout del equipo visitante.
Bellinger se acercó a revisarla. Al principio la mujer se quedó en su asiento y recibió una bolsa de hielo, pero se fue unos 15 minutos más tarde para recibir más atención.
En la novena entrada, una asistente corrió hacia Bellinger en el jardín derecho. El estaba tratando de defenderse de ella, y el personal de seguridad la abordó mientras intentaba abrazar a Bellinger.
Al comienzo de la temporada 2018, los 30 estadios de las Grandes Ligas expandieron las redes de protección al menos a los extremos de los dugouts, luego de que varios asistentes fueron lesionados por bolas de foul hace dos años.
La seguridad de los asistentes ha sido objeto de un mayor escrutinio luego de que dos aficionados fueron alcanzados por bolas de foul en el último mes en Houston y en un juego de los Medias Blancas de Chicago.
Linda Goldbloom, de 79 años, murió en agosto del año pasado, luego de que una pelota se disparó sobre la red detrás del plato y la golpeó, en un juego celebrado en el Dodger Stadium.
Alan Fish, de 14 años, estaba a dos filas del campo, en la línea de primera base, cuando una bola lo golpeó, en 1970.
Tanto Fish como Goldbloom murieron cuatro días después de los accidentes.