México, 31 jul (EFE).- El presidente de Altos Hornos de México (AHMSA), Alonso Ancira, se dijo un perseguido político y afirmó que la acusación en su contra por la presunta venta irregular de una planta de fertilizantes a la empresa estatal Pemex «se va a caer», en declaraciones a la emisora Radio Fórmula desde España.
Ancira, detenido el 28 de mayo en el aeropuerto de Palma de Mallorca, afirmó que «las acusaciones no tienen peso, son una serie de trucos».
«El 90 por ciento de lo que está ahí (en la denuncia) es falso. Las autoridades mexicanas la tienen difícil acá. Es muy fácil que en los siguientes 60 o 90 días se caiga la acusación».
Los delitos que se le atribuyen en México están relacionados con el supuesto sobreprecio en la venta de la planta de fertilizantes de Agro Nitrogenados a Pemex en 2013.
Según los investigadores, la venta de la planta fue sellada con un sobreprecio de unos 500 millones de dólares por AHMSA cuando Pemex era dirigida por Emilio Lozoya, sobre quien también pesa una orden de captura.
En la entrevista, Ancira aseguró que en la venta de la planta intervinieron bancos y constructoras internacionales, y que incluso le pagaron menos de lo que decían los valuadores.
Debido a lo anterior, Ancira afirmó que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, «está perdido con las cifras de compra venta de Agro Nitrogenados».
«Según el presidente valía 50 millones de dólares y el puro muelle valía 150. La valuación iba de los 400 a los 320 millones de dólares. Pemex todavía me debe 9 millones de dólares», aseveró.
El también dueño de AHMSA se dijo perseguido político del actual Gobierno, y consideró que tal vez «estaban persiguiendo a funcionarios de Pemex que a lo mejor sí lo ameritan».
Después de su detención en Mallorca, Ancira ingresó a prisión por orden de un magistrado de la Audiencia Nacional, que un mes después le impuso una fianza de 1 millón de euros para salir de la cárcel. El empresario pagó esa cantidad y quedó en libertad el 1 de julio.
Al respecto, el empresario informó que AHMSA pagó la fianza «porque hay una póliza de seguro que garantiza cubrir los gastos en caso de algún problema legal».
Por otro lado, indicó que seguirá negándose a la extradición al país latinoamericano. «Necesitaría que me fallara la cabeza para aceptar la extradición a México», declaró.
No obstante, dijo que si pudiera se trasladaría a Estados Unidos, por tener también la nacionalidad estadounidense.
«Yo pedí que me extraditaran a Estados Unidos, a mi país de origen. Si me consiguen mi pase, me allano mañana y me voy para allá. Mis cuentas en Estados Unidos están disponibles», acotó.