Dos miembros clave del Cártel de Sinaloa, Héctor Alejandro Apodaca Alvarez, de 53 años, y Mark Anthony Roque Bustamante, de 33, han sido sentenciados a cadena perpetua por su participación en una red de tráfico de fentanilo, metanfetamina y cocaína en los Estados Unidos. La sentencia fue dictada mientras que otros cinco cómplices recibieron penas menores, según informaron las autoridades judiciales este jueves.
La red, operativa en al menos ocho estados, incluidos Florida, California, Arizona y Massachusetts, fue desarticulada por las autoridades federales en una serie de arrestos que llevaron a juicio a los involucrados.
Apodaca Álvarez, quien trabajó directamente con Ismael ‘El Mayo’ Zambada García, cofundador del Cártel de Sinaloa, fue señalado como el principal operador de la red, utilizando el correo de EE.UU. y su negocio de transporte por carretera para enviar grandes cantidades de drogas, según reveló la acusación.
Según el Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DOJ), Apodaca Álvarez coordinaba directamente con miembros del Cártel de Sinaloa para la distribución a gran escala de narcóticos. Además, se detalló que las pastillas prensadas de fentanilo que vendía tenían una potencia tan letal que estaban causando estragos en la población.
El seguimiento a Apodaca Álvarez condujo a la identificación de Roque Bustamante como la principal fuente de suministro de la droga. Ambos esperaban recibir armas de fuego, incluidos rifles de alto poder, a cambio de su contrabando a México.
El arresto de Apodaca Álvarez se llevó a cabo en Florida, donde fue sorprendido entregando 16 kilogramos de fentanilo y 2 kilogramos de cocaína a un agente encubierto.
Además de los dos principales implicados, otros cinco cómplices, Austin Toma Grupee, Luis Tejada Velásquez, José Chávez Zaragoza, Jonathan Nicholas Chávez y Jorge Moreno, también fueron arrestados y condenados por su participación en la red de tráfico de drogas.
Todos los implicados se declararon culpables y enfrentaron penas proporcionales a su grado de implicación en la operación delictiva.
Con información de EFE