CIUDAD DE MÉXICO (EL UNIVERSAL).- El impacto sobre los precios de los alimentos y energía por la guerra en Ucrania, podría durar años, advirtió el Banco Mundial (BM).
En un nuevo reporte que se dio a conocer esta mañana, se espera que los precios de las materias primas se mantengan muy por encima del promedio de los últimos cinco años.
«Se está agravando por un aumento en las restricciones en el comercio de alimentos, combustibles y fertilizantes», dijo el vicepresidente de Crecimiento Equitativo, Finanzas e Instituciones del BM, Indermit Gill, al afirmar que estos «desarrollos han comenzado a despertar el espectro de la estanflación».
Se alerta que en caso de una guerra prolongada o sanciones adicionales a Rusia, los precios podrían ser incluso más altos y más volátiles de lo que se proyecta actualmente.
Para el BM es previsible que los precios de la energía aumenten más del 50 % en 2022 antes de disminuir en 2023 y 2024.
Mientras que para los precios no energéticos, incluidos los de la agricultura y los metales, aumentarán casi un 20 % en 2022 y también se moderarán en los siguientes años.
Alertó que la guerra en Ucrania ha causado un gran impacto en los mercados de productos básicos, alterando los patrones globales de comercio, producción y consumo de manera que mantendrá los precios en niveles históricamente altos hasta fines de 2024.
Ponderó que el aumento de los precios de la energía en los dos últimos años ha sido el mayor desde la crisis del petróleo de 1973.
Respecto del alza de precios de los productos básicos alimentarios, de los cuales Rusia y Ucrania son grandes productores, y los fertilizantes, que dependen del gas natural como insumo de producción, han sido los mayores desde 2008, enfatizó.