“El Oriente de la ciudad está identificado como una de las zonas en donde más violencia se ejerce, precisamente fue fundamental que el Centro de Justicia para mujeres, que pertenece a la Fiscalía del Estado, se ubicará en esa zona de la ciudad”, aseguró Jesús Figueroa, fiscal general del Estado.
Aunque señala: “Este no es un problema de zonas, también sabemos que hay menos denuncias en las áreas rurales precisamente por el tema cultural, se tiene que ir avanzando y enseñar a las mujeres del campo a que no permitan la violencia psicológica y económica, que también es muy importante, porque luego a veces el agresor es el que lleva el sustento económico y de ahí es que a veces piensan las víctimas de violencia en hacer la denuncia”.
Explica que la perspectiva de género primero los obliga a identificar si hay una relación de poder del hombre hacia la mujer, después identificar qué tipo de situación se presentó y si hay una violencia sistemática, como por ejemplo, puede ser la violencia del padre hacia los hijos y donde la mujer es testigo a veces también, y víctima por una serie de factores, como el estudio.
Al cuestionarlo sobre que el INEGI mencionó que el 23% de los ataques contra mujeres se daban en el interior de los hogares, sostiene el fiscal: “Nosotros podríamos incluso pensar que es más alto que un 23%, aunque es un número nada más, para recabar bajo la perspectiva de género las investigaciones, a la violencia por eso se le denomina el tipo penal, violencia familiar, porque es dentro de la familia, y también entender que a veces no es exclusivamente un tema de esposo a esposa, de pareja hombre a mujer, sino que también la violencia se presenta de hijos que tienen problemas de drogadicción hacia sus padres, se han reportado muchos casos en donde los hijos golpean a los padres, entre hermanos o incluso también hay padres que ejercen violencia hacia sus hijos. La idea es erradicar la violencia en todos sus tipos y de todas sus relaciones”.