El INEGI presentó ayer los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública, en los que Aguascalientes aparece entre las entidades con la mayor cifra negra de delitos no denunciados y con un aumento en la percepción de inseguridad entre la población.
En el reporte donde se expone la radiografía del problema de la inseguridad que se enfrenta a nivel nacional ante la ola creciente de robos o asalto en calle o transporte público, fraude, extorsión, amenazas verbales, robo total o parcial de vehículos, robo en casa habitación y otros más que figuran como los de mayor incidencia, se destaca que en el caso particular de Aguascalientes y de los demás estados de la zona centro del país, es creciente la percepción de la inseguridad en las colonias y municipios.
Se precisa que mientras que en el país la tasa de incidencia delictiva durante 2022 fue de 28,701 delitos por cada 100 mil habitantes, en el caso particular de Aguascalientes la tasa fue de 26,306, siendo de hecho la cuarta más alta, sólo después de la de 35,823 delitos por cada 100 mil habitantes que reportó Querétaro, los 32,823 de San Luis Potosí y los 28,928 de Jalisco, quedando en el quinto lugar Guanajuato con una tasa de 23,011 delitos por cada 100 mil habitantes.
En la llamada “cifra negra” y que corresponde a los delitos no denunciados, Aguascalientes está debajo de la media nacional que fue de 92.4% de delitos no denunciados, luego de que presentó una tasa de 92.2 por ciento.
Los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública indican que en 2022, 27.4% de los hogares en México tuvo, al menos, una o uno de sus integrantes como víctimas del delito y que hubo 21.1 millones de víctimas de 18 años y más, por lo que la tasa de prevalencia delictiva fue de 22,587 víctimas por cada 100 mil habitantes, cifra inferior respecto a 2021.
De igual manera se detalla que los delitos más frecuentes fueron fraude, robo o asalto en calle o transporte público y extorsión, además de que se destaca que el año pasado ocurrieron en el país un total de 26.8 millones de delitos, de los cuales 92.4% no se denunció o la autoridad no inició una carpeta de investigación, siendo a este subregistro lo que se denomina la “cifra negra”.
En el desagregado, se tiene que comparado con 2021, en 2022, la tasa de delitos por cada 100 mil habitantes bajó en cuatro entidades federativas, tres presentaron un alza y 25 no tuvieron cambios. En 2022, las entidades con las tasas más altas fueron Ciudad de México, con 46,032; Estado de México, con 36,583, y Querétaro, con 35,823. Los estados con las tasas más bajas fueron: Chiapas, con 14,111; Veracruz, con 17,129, y Tamaulipas, con 18,205. El delito más frecuente fue fraude, con una tasa de 5,770. Siguieron el robo o asalto en calle o transporte público, con 5,689, y extorsión, con 5,056. La incidencia delictiva en la mayoría de los delitos personales —los que afectan a la persona de manera directa y no colectiva (como robo a casa habitación)— fue mayor en los hombres que en las mujeres.