Ya falta menos para el nombramiento del nuevo Obispo de Aguascalientes, sin embargo, el presbiterio diocesano no debe especular sobre la selección de quién podría ocupar la sede vacante que dejó José María de la Torre Martín tras su fallecimiento el 14 de diciembre de 2020.
“A nivel diocesano ya se hizo todo lo que teníamos que hacer y ahora le toca a la Nunciatura y al Papa Francisco emitir el nombramiento correspondiente, y tomando en cuenta que ya transcurrieron más de ocho meses, se supone que ya no falta tanto, y en cualquier momento podrían darnos la sorpresa”, manifestó el vocero del Obispado, Rogelio Pedroza.
Comentó que siguiendo el tiempo promedio que se ha manejado en otras diócesis que también perdieron a su Obispo, en promedio el nombramiento tendría que darse en septiembre, cuando se cumplen nueve meses del fallecimiento del séptimo Obispo de Aguascalientes, aunque no se descarta que el nombramiento ocurra hasta diciembre.
Por ahora se desconoce si se llevaron a cabo encuestas entre sacerdotes para conocer perfiles y delinear el que se requiere, ya que la situación se maneja con mucha secrecía, y ni siquiera los sacerdotes que pudieran ser candidatos lo saben.
“Nosotros no sabemos nada al respecto, y en el caso del administrador diocesano, no se tiene facultad alguna de sugerir nombres, pues no está permitido, porque la Iglesia es muy prudente y maneja sus mecanismos en el secreto total”, manifestó el vocero.
Por lo tanto, los sacerdotes desconocen por completo si se llevó a cabo alguna encuesta, ya que todo se maneja en plena discreción, en secreto y no existen rumores al respecto porque se conoce perfectamente el derecho canónico y es sabido que se prevén sanciones para quienes se involucren en estos temas, por lo que están conscientes de que hay que esperar, mientras que el Papa Francisco está en plena libertad de elegir a quien considere que cumple con el perfil requerido para Aguascalientes.