Las funerarias comenzaron a padecer el desabasto de ataúdes y de otros insumos para la prestación de sus servicios, como la preparación de los cuerpos, debido no sólo a la alta demanda que se registra de los mismos, sino también a la escasez de materias primas para la fabricación de las cajas de muerto.
Empresarios del ramo revelaron a HIDROCÁLIDO que los proveedores dejaron de abastecer de ataúdes tanto metálicos como de madera, bajo el argumento de que no hay herrajes y tampoco madera, por lo que a lo mucho apenas se está surtiendo la mitad o menos de los féretros que se solicitan.
Se aseguró que esta situación está siendo incluso aprovechada por los fabricantes o por los intermediarios para encarecer el costo de las cajas de muerto, por lo que también las funerarias se están viendo obligadas a ajustar el precio de las mismas, ocurriendo lo mismo en el caso de la renta de ataúdes e incluso en las incineraciones.
“Se nos argumenta por los proveedores, que además de que no hay madera porque está detenida la actividad en los aserraderos, las empresas o talleres fabricantes de los ataúdes también suspendieron labores o trabajan a medio gas a causa de la pandemia, por lo que sólo pueden entregarnos una parte del material (cajas de muerto) que se solicita para cubrir las necesidades del servicio, lo que nos está generando un problema porque además lo poco que se está surtiendo llega más caro”, explicó uno de los empresarios del ramo que se ha visto afectado por esa situación.
Explicó que si bien es cierto que en el caso del municipio capital la mayoría de las familias que tienen la desgracia de perder algún familiar por el coronavirus recurren a la casi inmediata cremación del cuerpo de la persona fallecida, sin embargo en todos los municipios del interior y sobre todo en las comunidades rurales y rancherías se mantiene la tradición de darle sepultura a los muertos, por lo que la demanda del servicio completo de las funerarias es mucho mayor.
En las actuales condiciones, explicó, son contadas las funerarias de Aguascalientes que cuentan con stock completo de ataúdes, pues incluso algunas ya nomás cuentan con el material que exhiben en sus salas, en virtud de que no se están entregando los pedidos a tiempo y completos, bajo el argumento de que hay escasez de insumos para su elaboración a nivel nacional y de que las empresas fabricantes de este tipo de productos también están en receso por ese motivo y por la pandemia misma.