Con la CEDH sometida a su esfera y ‘vigilante’ de que el decreto de AMLO para devolver a los militares y marinos a las calles cumpla con sus propios términos, los opositores panistas volvieron a caer en su propia trampa, pues desmemoriados como están demostrando ser, se olvidaron que ya les falló su apuesta de detener la aprobación de aquel otro decreto, ya se ve que fallido, para crear la Guardia Nacional, pues no entendieron que parte del hartazgo de la ciudadanía que dio su amplio triunfo al hoy presidente tenía que ver con el deterioro de la seguridad.
Lejos de aprovechar la circunstancia, la oposición, la panista y la otra, si tal cosa existe, tratan ahora de censurar el regreso de las FFAA a las tareas de seguridad declarando su presunta inconstitucionalidad, sin sumergirse en el grado de apoyo que tal medida pueda obtener de la población y censurando al mandatario por hacer lo que ellos mismos le habían reclamado, que asumiera un compromiso real para devolvernos la paz, comportándose así como aquella famosa gata Dora del cuento.
Por lo demás demuestran por qué la irrelevancia de la oposición a AMLO, pues sus reclamos de hoy serán contrastados con sus apoyos de ayer, pues no recordamos que nadie de entre ellos se opusiera en el sexenio de Calderón a sacar de los cuarteles a nuestros soldados, ni hicieran nada cuando también Peña Nieto acabó optando por esa vía, al parecer la única que, a pesar de los pesares, puede dar alguna tranquilidad a los mexicanos.