La aprobación de la Ley de Hidrocarburos, al igual que la gran mayoría de las propuestas del Gobierno federal, redunda en perjuicio no sólo de las empresas, sino del país en general; estas leyes sólo nos llevarán al desastre a una velocidad rápida y peligrosa, expresó Juan Manuel Ávila Hernández, presidente de la Coparmex, además reconoció que se retirarán las inversiones extranjeras, pues nadie querrá meter su dinero a un país que se maneja por ideología y no por el uso de la razón.
En ese sentido, Ávila Hernández manifestó que la aprobación de esta reforma vendrá a encarecer los combustibles y generar desabasto, pues al haber menos competencia hay más margen para el monopolio, y en este escenario se podría dar si hay un fallo de suministro en Pemex, pues los privados verán su infraestructura vulnerada.
Por otra parte, si se pretende combatir el comercio ilegal, la misma reforma no lo hará, es decir, la importación ilegal se da porque no registran los combustibles en la fracción arancelaria como tal, la gasolina entra como si fuera otra mercancía y no se hacen las declaraciones y pagos correspondientes, es la misma autoridad la que lo permite al no ejercer sus facultades, por lo tanto, se seguirá cayendo en la arbitrariedad.
Finalmente, el presidente mencionó que con seguridad se interpondrán amparos y esto claramente va a terminar en arbitrajes internacionales que vendrán costando mucho dinero, además las inversiones empezarán a retirarse.