Guadalajara (México), 13 ago (EFE).- Un centenar de estudiantes, profesores y familiares se manifestaron este jueves para exigir justicia por el asesinato de Jonathan Santos, un joven activista LGBT del estado de Jalisco (oeste de México) cuya muerte es investigada por la Fiscalía estatal como feminicidio, entre otras líneas.
La madrugada del pasado martes, el joven de 18 años y estudiante del Politécnico de la Universidad de Guadalajara fue encontrado muerto a unas cuadras de su casa en una colonia popular del municipio de Zapopan, con un tiro en la cabeza.
Con pancartas, globos blancos y vestidos de blanco y negro, sus compañeros realizaron una sencilla protesta dentro de la escuela donde él estudiaba guardando distancia y protegidos con cubrebocas.
«La homosexualidad no es una enfermedad, la homofobia, sí», «Justicia para Jonathan Santos» y «No estamos completos, nos faltas tú», fueron algunas de las frases que expresaron en sus pancartas.
Los manifestantes, entre los que se encontraban algunos de sus familiares, mostraron su conmoción por el asesinado de Santos, quien por varios años mostró su activismo a favor de la comunidad LGBT.
«Queremos que se haga justicia porque no es justo que sigan pasando casos así, que por ser de un gusto diferente se tenga que pagar como le tocó a él, con su vida», dijo Anahí Jiménez, prima del joven.
El presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios, Javier Armenta, denunció que el joven no tenía algunas de sus pertenencias cuando fue encontrado el martes.
Reveló que en los últimos seis años 14 jóvenes universitarios han perdido la vida a manos de la delincuencia y otros ocho permanecen en calidad de desaparecidos.
Tras nombrarlo por última vez, los asistentes soltaron los globos y ofrecieron un minuto de aplausos en homenaje a Santos, quien cursaba la carrera de informática.
En México, cada tres días matan a una personas LGBT, de acuerdo con la organización Letra S, que documentó 117 asesinatos motivados por el odio en 2019, el primer año de la presidencia de Andrés Manuel López Obrador y el más violento del último lustro.
SIGUEN TRES LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN
El Fiscal de Jalisco, Gerardo Octavio Solís, informó el miércoles que el caso es investigado en tres líneas: «por robo», «por crimen pasional» y por «feminicidio» debido a su «preferencia sexual», aunque a Santos no se identificaba como una persona transgénero.
De acuerdo con la investigación, el joven había acudido a una fiesta de la que se retiró dando a entender que se vería con alguien. La Fiscalía indaga si alguien trasladó a Santos desde el lugar de la fiesta hasta la colonia donde vivía.
El colectivo Unión Diversa de Jalisco A.C denunció que el caso «evidencia la violencia e inseguridad» en el estado y «la falta de protocolos para casos de crímenes de odio por orientación sexual», pues el protocolo de feminicidio «no aplicaría ya que el compañero no se identificaba como mujer trans».
Con 7,8 millones de habitantes, Jalisco registró en el primer semestre de 2020 un total de 1.276 homicidios dolosos, uno de los estados con más asesinatos en números absolutos.
La región, que alberga a la zona metropolitana de Guadalajara, es sede del cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), considerado el grupo criminal más poderoso de México.