México, 21 nov (EFE).- El exvicepresidente boliviano Álvaro García Linera, asilado en México junto a Evo Morales, reafirmó este jueves que ni él ni el exmandatario boliviano concurrirán a las próximas elecciones, aunque exigió poder estar en el país durante los comicios.
«Está claro que Evo y Álvaro no vamos a ser candidatos para no generar rechazo de las fuerzas golpistas», confirmó García Linera en entrevista con Efe en Ciudad de México, donde aseguró que dentro del Gobierno interino de Bolivia «están dispuestos a seguir matando bolivianos para que Evo y Álvaro no sean candidatos».
Tanto el Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales como la presidenta interina Jeanine Áñez han presentado ante el Parlamento proyectos para la convocatoria de elecciones ante la crisis política y social que sufre el país y que ha dejado más de 30 muertos en el último mes.
García Linera (Cochabamba, 1962) exige a Áñez, a quien calificó de «presidenta golpista», que no se quiera «perpetuar» en el poder y que los próximos comicios, que se podrían celebrar entre enero y abril del próximo año, sean «transparentes» y cuenten con la participación de todas las fuerzas políticas.
«No vamos a ser candidatos, pero tenemos derecho a hablar, a opinar, a pensar, a proponer, a apoyar a alguien. Es nuestro derecho constitucional», dijo García Linera, quien se asiló en México junto a Morales luego de que el mandatario boliviano renunciara forzado por los militares ante la crisis social desatada por su reelección.
García Linera dijo que ahora no hay «garantías» para volver a Bolivia, donde ha sufrido amenazas de muerte y su amplia biblioteca corrió el riesgo de ser incendiada, pero deseó estar en su país durante las elecciones para apoyar a la «nueva generación de líderes» del MAS.
«Si son elecciones libres, con las garantías constitucionales respetadas, hay que reconocer gane quién gane», aseveró al ser cuestionado sobre una eventual victoria de la derecha.
UN ERROR DE CÁLCULO
El que fuera vicepresidente boliviano desde 2006 admitió que no calculó bien la respuesta que iba a tener la derecha boliviana cuando decidió concurrir con Evo Morales para un cuarto mandato.
«No habíamos calculado este despertar tan racializado y fascista de sectores acomodados de clases medias y altas contra los indígenas», dijo García Linera sobre las protestas contra la reelección de Morales que derivaron en su huida del país.
El intelectual marxista siempre consideró que «habría sido más útil trabajando en la sociedad civil» y construyendo opinión pública, pero recordó que tuvo que concurrir como candidato a la Vicepresidencia porque así se lo pidió la organización sindical Central Obrera Boliviana.
De todas formas, asegura que no se arrepiente de haber concurrido a las elecciones ya que, según dijo, los comicios del pasado 20 de octubre fueron limpios y la candidatura de Morales había sido avalada por el Tribunal Constitucional.
«Por luchar por la igualdad, uno no puede arrepentirse. Puede decir que habría escogido otro camino, pero no arrepentirse», sostuvo García Linera.
EVO NO LIDERA LAS PROTESTAS
Cuestionado sobre el audio en el que Morales presuntamente organiza desde México bloqueos para impedir que lleguen alimentos a ciudades bolivianas, García Linera dijo no haber hablado sobre el tema con el expresidente boliviano.
El mismo Morales aseguró que se trata de un «montaje» en su contra del Gobierno interino de Bolivia, que ayer filtró este audio y anunció una denuncia por «crímenes de lesa humanidad» contra el expresidente boliviano.
Ante esto, García Linera sostuvo que las movilizaciones en contra del Gobierno interino de Bolivia «no se organizan por teléfono, ni por WhatsApp, ni por Skype» y aseguró que no hay «líderes visibles» con quienes mantengan contacto desde México.
«La magnitud de la movilización, especialmente en la ciudad de El Alto, es un tema que ni siquiera tiene que ver con dirigentes cercanos a nosotros. Es una explosión que viene de abajo», reivindicó el político, quien se preguntó: «¿Cuando te matan qué puedes hacer para defenderte?».
García Linera, que estudió Matemáticas en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde mantiene «bonitos recuerdos», lamentó haber regresado a tierras mexicanas «como un ciudadano perseguido en su país» y no de forma voluntaria.
Bolivia está sumido en uno de los conflictos más graves de su historia reciente, desde que el día después de los comicios del 20 de octubre comenzaron las denuncias de fraude a favor de Evo Morales, quien fue proclamado vencedor para un cuarto mandato consecutivo por la autoridad electoral.
El 10 de noviembre la Organización de Estados Americanos (OEA) advirtió en un informe graves irregularidades en los comicios y horas después Evo Morales anunció su renuncia tras casi 14 años en el poder, forzado por las Fuerzas Armadas, para al día siguiente salir hacia México, donde está asilado.