México, 10 dic (EFE).- Existe una importante necesidad de generar una política integral en México para hacer frente a la epidemia de obesidad que vive el país, señalaron este martes autoridades de salud.
«No hay que convencer a nadie de que hay una epidemia y que tenemos que actuar, necesitamos una política multisectorial, este problema no se puede combatir con medidas aisladas», manifestó el doctor Juan Rivera, director del Instituto Nacional de Salud Pública.
Durante la inauguración del Foro Internacional de Alto Nivel en Prevención de Obesidad Infantil en la Ciudad de México, el especialista señaló que uno de los principales detonantes de la obesidad en el país es la dieta poco saludable que es alta en azúcares, grasas, sodio y alimentos ultraprocesados.
«Es el factor número uno que detona esta epidemia», explicó Rivera.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud 2018, presentada este lunes, tres de cada cuatro mexicanos mayores de 20 años presentan sobrepeso u obesidad, mientras que 8,2 % de niños de uno a cuatro años se encuentra en esta condición, cifra que aumenta a 8,4 % en zonas urbanas.
Mientras que en adolescentes de 12 a 19 años, la cifra total de sobrepeso es del 38,4 % del total.
La doctora Lilia Castillo, representante de la Academia Nacional de Medicina, señaló que la obesidad ha tenido estragos especialmente en la salud de los niños mexicanos, ya que ya se han empezado a detectar algunos infartos en adolescentes.
«Tenemos una dieta de alimentos fritos, ricos en grasas trans y en sodio, lo que eleva la hipertensión arterial. Hoy tenemos niños hipertensos y datos de que algunos niños se han infartado», lamentó.
Además, los especialistas destacaron que las niñas, niños y adolescentes que sufren sobrepeso y/o obesidad tienen mayor probabilidad de desarrollar enfermedades como diabetes, hipertensión, síndrome metabólico, enfermedades del corazón y problemas ortopédicos, solo por mencionar algunos.
El doctor Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de México, aceptó que esta «es una grave epidemia» a la que calificó como «una amenaza social que tiene graves consecuencias en la calidad de vida de las personas».
El funcionario reconoció que se requieren políticas públicas integrales «pero no en un futuro, pues es algo que no puede esperar».
Es por ello que aseguró que desde el gobierno mexicano se han empezado a dar pasos como la creación del Grupo Intersecretarial de Salud, Alimentación y Medio Ambiente «que busca un sistema agroalimentario justo, saludable y sustentable».
Del mismo modo, se aprobaron modificaciones a la ley general de salud que modifica el etiquetado de productos, además de la regulación de la publicidad dirigida a niños, la garantía de espacios saludables en entornos escolares y el ajuste de impuestos especiales a productos poco saludables (IEPS).
En este último punto, dijo, se espera que para próximos ejercicios fiscales los IEPS puedan tener un aumento que sea suficiente para duplicar el presupuesto en salud.
Finalmente, el doctor Juan Rivera señaló que es urgente volver a comer productos naturales desde la infancia ya que es benéfico para obtener los nutrientes necesarios para el organismo.
«Hay que trabajar en un enfoque de curso de vida, proteger a la infancia y que la alimentación sana y fresca sea la base», finalizó.