CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 22 (EL UNIVERSAL).-
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, señaló hoy que, hasta el momento, «no hay indicios de un ataque terrorista» en la explosión de un vehículo en el cruce fronterizo entre Estados Unidos y Canadá.
El incidente ocurrió en el puente Rainbow, cerca de las cataratas del Niágara y provocó un enorme despliegue de seguridad, en vísperas del Día de Gracias.
«En este momento, no hay indicios de un atentado terrorista», declaró Hochul en rueda de prensa.
Según la gobernadora, el vehículo está «básicamente incinerado», sin que quede nada más que el motor, y con trozos esparcidos por toda la escena. «Los trozos están esparcidos por 13 ó 14 cabinas, por lo que la escena es muy amplia», explicó. Las dos personas que iban en el vehículo murieron.
Hochul dijo que un vecino del oeste de Nueva York se vio implicado en la explosión del puente. Un miembro de la Patrulla de Fronteras que trabajaba en la caseta resultó herido, añadió.
De acuerdo con la cadena de televisión CNN, una revisión de videos de los alrededores en los momentos previos al incidente muestran que el coche parece haber estado en un casino cercano de Nueva York antes de intentar cruzar la frontera y estrellarse.
Tres pasos terrestres entre Canadá y Estados Unidos –Lewiston, Peace y Whirlpool-, que fueron cerrados tras el incidente ya reabrieron; el puente Rainbow permanece cerrado, dijo.
El servicio de Amtrak sigue suspendido temporalmente entre el estado de Nueva York y Canadá. La gobernadora aclaró que el aeropuerto de Buffalo Nueva York «nunca cerró» y no ha habido cese de servicio allí, dijo el gobernador.
Videos de lo ocurrido muestran un vehículo que va a toda velocidad, se estrella, sale volando, cae y explota.
El gobierno de Canadá describió el incidente como algo «muy grave» y aumentó la vigilancia por precaución.