La falta de oportunidades arrastra a las personas a encontrar una oportunidad en la delincuencia organizada, por lo que se requiere un análisis de fondo para identificar los factores que los llevan a involucrarse y no solamente estigmatizar o criminalizar, manifestó Mariana Ávila Montejano, fundadora del Observatorio de Violencia Social y de Género.
En este sentido señaló que también se debe valorar el hecho de que las personas que son detenidas solamente son privadas de su libertad sin darles una alternativa de reeducación y con menos oportunidades para enfrentarse a la misma problemática que los llevó a delinquir.
La activista dijo que se requiere un análisis a fondo para identificar los factores que provocan que las juventudes se involucren con la delincuencia organizada y no solamente estigmatizar o criminalizar.
Incluso apuntó que las autoridades pueden y tienen las herramientas para identificar dónde se encuentran los narcolaboratorios, quiénes están negociando, quién está introduciendo los armamentos de manera ilegal al Estado, así como todo el tráfico de drogas.
No es desconocido que la venta de sustancias ilícitas se ha convertido en una actividad que se ha insertado en la economía en Aguascalientes ante la falta de oportunidades, manifestó Ávila Montejano, sobre todo para algunas personas que habitan en colonias o espacios que están muy precarizados.
Dio a conocer que el Estado tiente el 70% de las mujeres que son madres jefas de familia, que se encargan de sostener a sus hogares, por lo que no es ajeno que ellas pudieran llegar a participar en la venta de sustancias ilícitas; “nos preocupa, porque cada vez que una o un ciudadano y adolescentes se involucran con la delincuencia organizada, es un síntoma de la problemática que tiene que ver la falta de acceso a derechos básicos como vivienda, educación, acceso a un trabajo digno”.
Y apuntó que lo anterior habla de que el desarrollo profesional está estancado, “la problemática de fondo es otra, ya que la delincuencia es un efecto”, concluyó la activista.