TOLUCA, Méx., mayo 26 (EL UNIVERSAL).- Por considerar que fueron revictimizados durante la audiencia para conocer la reparación del daño que debe pagar uno de los tres feminicidas de la niña Fátima de 12 años, quien saldrá en libertad en el mes de junio, Lorena Gutiérrez, mamá de la víctima, demanda una reunión con el presidente del Poder Judicial, Ricardo Sodi Cuellar.
En entrevista durante la reubicación del memorial de su hija, que se ubicaba frente a palacio de gobierno, en la Plaza de Los Mártires, dijo que hace dos semanas durante la audiencia la jueza les exigió respetar todos los derechos de Misael Atayde Reyes, que quedará en libertad tras cumplir los cinco años a los que fue sentenciado por el feminicidio de la niña, en la comunidad de Las Rajas, Lerma, en el 2015. En donde junto con otros dos cómplices, la lapidaron, enterraron y abusaron sexualmente.
Lorena Gutiérrez, dijo que la magistrada les sentenció a tener que verlo en repetidas ocasiones, pues el pago del monto por reparación del daño tendrá que ser en partes, toda vez que no tiene dinero.
Además, les dijo que lo deben respetar porque le van a reintegrar todos sus derechos, él ya va a poder hacer un proyecto de vida, y la familia de Fátima lo tiene que respetar.
«Yo le quiero preguntar a quienes se dedican a hacer leyes y sentencias, si les mataran a una hija y después les pusieran en libertad al asesino, ¿Le respetarían todos sus derechos? Él jamás respetó el derecho a la vida que tenía Fátima, entonces nosotros por qué sí tenemos que respetar a los asesinos? Mizael no se readaptó», expresó.
Explicó que la revictimización en voz de la jueza es algo que quieren exponer directamente al magistrado Ricardo Sodi Cuellar, aunque reconoció que hasta el momento no les han confirmado la fecha de la reunión.
Reclamó también que debido a que Misael no tiene dinero para cubrir la reparación del daño, deberán esperar a que busque trabajo y de a poco le van a ir pagando, «como si nosotros fuéramos Coppel o Elektra con pequeños abonitos».
Esta mañana fueron reubicados a la Plaza González Arratia los dos memoriales de Fátima y Eugenia Machuca, ésta última asesinada en Ocoyoacac, el compromiso por parte de las autoridades fue cambiarlos de lugar por dos meses en lo que concluye la obra y después regresarlos a su lugar.