A toro un poco pasado, porque esto ocurrió hace 9 años, el senador Juan Antonio Martín del Campo le respondió a su antecesora en la alcaldía de Aguascalientes, Lorena Martínez Rodríguez, en cuestión de las fotomultas.
Ésta es la primera aparición pública del panista, que se impuso un voto de silencio al no verse favorecido para ser el candidato de su partido para la elección de gobernador, pero el tema, siempre polémico, lo sacó de su postración declarativa y le respondió duro y directo a la priísta.
De plano la responsabilizó de que se tuviera que cancelar ese programa hecho específicamente para reducir la tasa de accidentes, pues los conductores, al verse obligados a bajar la velocidad de sus vehículos, no habría tantos percances automovilísticos que le han costado la vida a tantas personas.
Y le dijo, palabras más, palabras menos, que ese programa no podía continuar porque las calles parecía que estaban bombardeadas por tanto bache, que aquí entre nos, éste ha sido un eterno problema, independientemente del partido que esté al frente del municipio capital.
Lo de las vialidades es una realidad hoy y hace 10 años de que apenas reparan alguna carpeta asfáltica, cuando otra ya está deteriorada, pero con el flujo vehicular actual, por supuesto que esto tiene que ocurrir.
Pero más allá de los dimes y diretes, se ha considerado reimplantar el programa, porque los accidentes vuelven a crecer y abundan por varios factores, entre ellos, uno de los más comunes es la alta velocidad, sin mencionar que los conductores a veces manejan sus vehículos bajo el influjo del alcohol o incluso de las drogas, además, ¿cómo soslayar el uso de los dispositivos, como el celular?, y no falta quienes hagan otras actividades sin importarles que tengan en sus manos la enorme responsabilidad de traer una unidad de motor.
Se ha mencionado constantemente que el uso de las fotomultas es con un mero afán recaudatorio, pero es que sólo así hace caso la gente, pues si le pega en el bolsillo las multas por el exceso de velocidad, entonces sí se acatan las reglas, ya que esa es la naturaleza humana: no lo hacemos porque nos convenga o sea lo correcto, sino porque pega en nuestros intereses.
Ahora, como lo reconoció la víspera el director de Seguridad Pública Municipal, al reducir la movilidad por el decreto necesario para contener la epidemia del Covid bajaron los accidentes, pero no perdamos de vista que hoy todo regresa a la normalidad, por lo que nuevamente las avenidas serán autopistas de carreras pues los alumnos retornan a las escuelas, se abren todos los giros comerciales, la actividad económica regresa al cien, por lo que volverán de nuevo las prisas, los congestionamientos y todo lo que provoca un caldo de cultivo para que sucedan percances.
Pero cambiar esta situación está en nuestras manos, literalmente, pues nosotros tenemos el control del volante, pero más nuestras decisiones, por lo que evitar percances no es misión imposible, con o sin fotomultas.