CIUDAD DE MÉXICO, (EL UNIVERSAL).- «Fue más de una hora de terror, el temblor se sintió allá arriba, todo se movía, luego nos quedamos a oscuras y fue una sensación horrible», comentó Gilberto, el usuario del Cablebús que grabó varios videos donde se observa que las cabinas se quedaron «colgadas» a más de 20 metros de altura en las inmediaciones de la alcaldía Iztapalapa.
En los videos se escucha que Gilberto trata de calmar a una mujer que por momentos entra en pánico y comienza a rezar al darse cuenta de la situación.
«La señora me estaba pellizcando la pierna porque le entraron los nervios, yo traté de calmarla y de calmarlos a todos, no había nada más que hacer y creo que sirvió porque estuvimos más de una hora allá arriba«, dijo en entrevista con EL UNIVERSAL.
Tras el movimiento telúrico, explicó que la cabina se movió gradualmente y al llegar a la estación San Miguel Teotongo, todos bajaron y cada quien se fue a su domicilio.
«Ya abajo pues todos estaban más tranquilos, ahí me di cuenta que todos eran vecinos, uno vivía frente a mi casa y los otros por ahí cerca. A la señora que estaba rezando la tuve que acompañar hasta su casa porque seguía nerviosa. Terminé con la pierna toda pellizcada, pero ni modo», comentó Gilberto.
Al igual que el resto de los usuarios, Gilberto asegura que seguirá utilizando el Cablebús, ya que es el sistema de transporte más rápido en aquella zona, «digo que es como la Montaña Rusa, primero te da miedo, pero una vez que te subes, quieres repetir y no te quieres bajar, así que ni modo, vamos para arriba otra vez», concluyó entre risas.