Lyon (Francia), 18 oct (EFE). – El actor mexicano Gael García Bernal cree que la violencia en México «no es una enfermedad ,sino un fenómeno social del que todos somos responsables», y por eso quiso centrar su última película como director, «Chicuarotes», en esta «derrota de la sociedad».
En una entrevista con Efe en Lyon, donde es invitado especial del Festival de cine Lumière, el actor calificó de «injusticia» que a muchos niños y niñas les pasen «cosas terribles» por culpa de una violencia de la que cree que todos son responsables.
«Yo me siento culpable y completamente comprometido con querer cambiar eso para los jóvenes, por eso quería contar una historia que lo pusiera todo sobre la mesa», explicó el intérprete de «Amores Perros» (2000) y «Diarios de motocicleta» (2004).
«Chicuarotes», que fue estrenada en el pasado Festival de Cannes y que ha presentado esta semana en el Festival Lumière, cuenta la historia de dos jóvenes que quieren salir de la pobreza en el pueblo de San Gregorio Atlapulco contando chistes disfrazados de payasos en el transporte público.
Como no consiguen mucho dinero, comienzan a asaltar a los pasajeros y a cometer una serie de delitos menores que culminarán con un secuestro.
«Es una historia terrible que me fascinaba porque olía a carnaval con un sentido del humor que desnuda y desvela muchos de los temas profundos que aparecen en la película», entre los que destaca el querer huir para tener una mejor vida.
El actor mexicano piensa que, tal y como refleja el personaje de la niña Heli, la solución no es escapar, sino «la responsabilidad de querer cambiar las cosas y no dejar a nadie abandonado».
Tras su segunda experiencia como director, después de haber debutado con «Déficit» (2007), Gael García Bernal se sigue considerando ante todo un intérprete.
«Se lo debo todo a la actuación. Me siento orgulloso y me divierte. Pero me gusta sobre todo porque gracias a mi trabajo como actor he logrando sentirme libre en todas las demás áreas al permitirme producir y dirigir», afirmó, antes de precisar rápidamente que también le «fascina» ponerse detrás de la cámara.
Profesores no le han faltado durante su carrera, que comenzó con 11 años. Desde su padre, el director de cine, Jose Ángel García, a figuras del cine actual como Alejandro González Iñárritu, Alfonso Cuarón o Pedro Almodóvar.
De Iñárritu, que le dirigió en «Amores Perros» (2000), dijo que le encanta su «energía vital y su condición física para hacer más y más», si bien matizó que «no le gustaría ser así», porque de vez en cuando prefiere «cansarse y aburrirse».
Por su parte, reconoció que de Cuarón, quien le dirigió en «Y tu mamá también» (2001), admira su «gran capacidad técnica y artística», así como su «sensibilidad con la que logra hacer grandes momentos de cine».
Mientras, sobre Almodóvar, que le dirigió en «La mala educación» (2004), no tiene tan buen recuerdo. En una charla posterior en el cine Odeón de Lyon, García Bernal afirmó que «admira y respeta» al cineasta español pero confiesa que no logró entenderse con él, no logró «entrar» en su cabeza.
«A pesar de que me eligió tras hacer un casting, durante el rodaje todo lo que hacía le parecía una mierda. Tuve que aceptar que sin dolor no había gloria», aseguró el actor mexicano con un juego de palabras en referencia a la última película del director manchego.
«Si no me divierto durante el rodaje o no hago las cosas con placer me da igual si el resultado es bueno», explicó y concluyó diciendo que la película hubiera sido «mejor» si hubiera podido disfrutar durante su trabajo.
Gael García Bernal volverá a dirigir en breve, esta vez junto a su «inseparable y buen amigo» el también actor y director Diego Luna, con quien realizará una serie sobre Hernán Cortés para la plataforma Amazon prevista para 2021, con motivo del 500 aniversario de la toma de Tenochtitlán que dio paso al establecimiento del régimen colonial español en tierras mexicanas.
Javier Villagarcía