México, 3 mar (EFE).- Al menos un medicamento para tratar el cáncer comprado por el Gobierno mexicano el año pasado ante la crisis de desabastecimiento se suministró a pacientes sin contar con el registro sanitario otorgado por el órgano regulador, denunció este martes la ONG Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
Se trata del metotrexato, que llegó en septiembre pasado de Francia, y que, según la investigación, no tenía el permiso normativo para ser administrado en México otorgado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) pero fue distribuido por las autoridades de salud.
El artículo denuncia que en la página de Cofepris, hasta el 2 de marzo, no aparecía el registro sanitario del productor Laboratorios Mylan para el metotrexato. «Tampoco el del medicamento oncológico vincristina, que recientemente se compró a Pfizer y que llegó de Estados Unidos para ser administrado a niños con cáncer», agregó.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell, confirmó en su momento que el metotrexato se adquirió sin registro sanitario de Cofepris.
«Sin embargo, el funcionario alegó que el medicamento tiene las aprobaciones de EMA, la Agencia Europea de Medicamentos, y que la importación fue posible gracias a un convenio internacional firmado por México», indicó el artículo.
«México hará uso de un convenio internacional con países de más altos estándares de regulación reconocidos por la Organización Mundial de la Salud», agregó López Gatell en días recientes, quien negó que llegaran medicamentos de dudosa calidad, según la investigación.
MCCI denuncia que Cofepris nunca respondió a sus múltiples peticiones para que mostraran los registros sanitarios de ambos medicamentos o la inspección sanitaria. Tampoco Laboratorios Mylan dio respuesta a varias solicitudes de entrevista.
«Aunque el metotrexato tiene la aprobación de la Federal Drug Administration (FDA), el equivalente estadounidense a Cofepris, y de la agencia europea EMA, según expertos eso solo indica que el compuesto químico es efectivo para tratar un padecimiento, pero no que se hayan seguido todos los procedimientos correctos de elaboración y transportación», puntualizó el texto.
México padece una situación de escasez de medicamentos que se ha acentuado -y visibilizado- desde que llegó al poder Andrés Manuel López Obrador, el 1 de diciembre de 2018, y que enfermos y expertos atribuyen a las políticas de austeridad del Ejecutivo y a nuevos modelos de compra.
Ante esta situación, el Gobierno mexicano habría tomado medidas poco claras, que critica MCCI.
«El 28 de enero del 2020 se publicó en el Diario Oficial de la Federación un acuerdo más de la Secretaría de Salud para importar medicamentos aunque no cuenten con los permisos sanitarios de Cofepris. El acuerdo otorga cinco días hábiles después de la importación de medicamentos para iniciar el proceso para obtener el registro sanitario», apuntó el texto.
Denunció además que la «nueva regla» provocó que la industria farmacéutica criticara falta de verificación, lo que puede afectar en la calidad y seguridad del producto.
FALLECE POR MEDICINA CON BACTERIA
Esta semana se dio a conocer que una medicina contaminada por una bacteria que se suministró en un hospital de Petróleos Mexicanos (Pemex) del municipio de Villahermosa dejó un muerto y decenas de personas afectadas.
Cuestionado sobre este tema en la rueda de prensa desde Palacio Nacional, el presidente lamentó el caso e informó este martes que el próximo 10 de marzo se informará sobre la calidad de las medicinas que se importan y suministran.
Además, dijo que a partir de abril de 2020 se empezará ya a preparar la compra de medicamentos del próximo año para evitar problemas de escasez.