CIUDAD DE MÉXICO, octubre 21 (EL UNIVERSAL).- La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) advirtió que «es altamente probable que las condiciones epidémicas cambien en las próximas semanas, y se incremente no sólo el número de casos de Covid-19, sino también otras infecciones respiratorias agudas propias de la temporada, entre las que se encuentran las causadas por los virus de influenza y el sincitial respiratorio, que pueden provocar cuadros potencialmente graves en personas vulnerables» en México.
La máxima casa de estudios destacó que las cinco olas de Covid-19 en México sucedieron luego de picos registrados en Europa y Estados Unidos.
Por su parte, la Secretaría de Salud señaló que los casos de Covid-19 en el país llevan 14 semanas a la baja, luego de que las autoridades determinaron que el uso de cubrebocas ya no es obligatorio.
Ante ese panorama, la UNAM emitió cuatro recomendaciones:
1. Completar el esquema de vacunación contra Covid-19 con los refuerzos que correspondan de acuerdo con la edad o condición de salud individual. Es conveniente que todas las personas mayores de 60 años, así como los de más de 18 con alguna enfermedad predisponente y todo el personal de salud tengan dos refuerzos. Y quienes sean mayores de 18 sin enfermedades predisponentes cuenten con un refuerzo adicional a su primer esquema, sin importar cuál o cuáles vacunas hayan recibido.
2. Usar correctamente el cubrebocas al realizar actividades en espacios cerrados.
3. Ventilar de manera permanente lugares cerrados donde se realicen actividades (abrir puertas y ventanas), así como tener higiene individual (lavado de manos, uso de gel, estornudo de etiqueta) y limpieza de instalaciones.
4. Ante la presencia de síntomas de enfermedad respiratoria, evitar acudir a sitios de trabajo, estudio o esparcimiento, y suspender viajes, para reducir el riesgo de contagios. Buscar diagnóstico, y en caso de confirmar que sea Covid-19, guardar aislamiento mínimo siete días a partir del inicio de síntomas o la primera prueba diagnóstica positiva (lo que ocurra primero), y regresar a las actividades una vez completado este periodo, siempre y cuando se cumplan tres días sin fiebre (sin tomar medicamentos para ello). No automedicarse, vigilar la evolución e identificar oportunamente cualquier complicación.