CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 30 (EL UNIVERSAL).-
El hackeo masivo llevado a cabo por el grupo «Guacamaya», como se autodenominan, dejó ver ciertos datos sobre la salud del presidente, Andrés Manuel López Obrador, donde, señalan, ha mentido al esconder hospitalizaciones de emergencia.
En correos electrónicos y documentos oficiales, compartidos a Latinus, se revela que el pasado 2 de enero, una ambulancia aérea del Ejército tuvo que ir a Palenque, Chiapas, donde se encuentra el rancho del presidente López Obrador, para trasladarlo al Hospital Central Militar de la Ciudad de México.
Hoy el Presidente aceptó la mayoría, pero puntualizó un par de ellos.
El presidente tuvo que ser monitoreado, canalizado y medicado antes de volar al aeropuerto de la Ciudad de México, para ser llevado de inmediato, en helicóptero, al hospital militar con diagnóstico grave, según los documentos, lo que fue matizado hoy por el propio mandatario en su conferencia mañanera.
En el espacio de Latinus se presentaron los documentos testados por el medio con el fin de proteger la identidad de los médicos militares y particulares del presidente.
En una tarjeta del grupo de servicios especiales de la policía militar se reporta que a López Obrador se le diagnosticó con angina inestable de riesgo alto, un preocupante mal cardiaco que puede conducir a infartos.
Días después, en Palacio Nacional, se le tomaron muestras de sangre y de laboratorio.
El 10 de enero, a través de su cuenta de Twitter, el mandatario Federal anunció que dio positivo a Covid-19, sin mencionar, ni él ni algún integrante de su gobierno «se refirió al traslado de emergencia ni al diagnóstico grave», señaló Loret de Mola.
Los documentos también señalan que del 4 y el 20 de enero, el presidente tuvo al menos diez consultas médicas, entre ellas la de su cardiólogo particular.
Al siguiente día, el 21 de enero, el mandatario fue ingresado al hospital central militar para un cateterismo, ahí durmió y fue dado de alta el día siguiente.
«Después de la hospitalización, ha recibido cuando menos 28 terapias físicas», informó Carlos Loret.
Respecto al cateterismo que se hizo a López Obrador, la Secretaría de Gobernación expresó en un comunicado este «fue fruto de estudios de rutina cada medio año».
También se señala que el 1 de septiembre de 2021, después de dar su informe de Gobierno, López Obrador visitó el Hospital Central Militar para recibir atención médica en las áreas de reumatología, ortopedia, radiología y laboratorio.
Derivado de los estudios, el mandatario, de entonces 67 años de edad, fue diagnosticado con gota. El reporte indica que le ofrecieron medicamentos, pero no los aceptó. Solo aceptó recibir terapia física.
Meses después, el 22 de diciembre del 2021, en el mismo hospital militar le diagnosticaron hipotiroidismo, para el que le recetaron sustitución hormonal con levotiroxina.
Por lo anterior, el periodista y colaborador de El Gran Diario de México, señaló que «la salud del presidente no es un asunto privado. En países democráticos, el estado de salud del jefe del Estado no se esconde ni se maquilla, se transparenta, se publican los exámenes médicos».
«Tengo varios padecimientos»: AMLO
En Palacio Nacional la mañana de este viernes, López Obrador dijo que todo lo revelado es cierto y que es de dominio publico.
Sin embargo, el mandatario señaló que el traslado de una ambulancia aérea a Palenque, Chiapas, donde se encontraba en enero de este año, fue por un riesgo de infarto y lo llevaron al hospital.
«Cuando uno va a ver a los médicos le hacen análisis de todo y pastillas para tiroides, hipertensión, pero estoy muy bien, muy bien».
López Obrador aseguró que lo más delicado que padece es la hipertensión, por lo que camina y va a escalar cerros para ejercicios de cardio. «Cuidar también los riñones».
Al manifestar que «todo está dicho», el presidente Andrés Manuel López Obrador minimizó el hackeo que realizó un grupo denominada «Guacamayas» y que extrajo información confidencial del gobierno federal, y aseguró que no le preocupa que se pueda dar a conoce información delicada de seguridad nacional, pues afirmó que «todo está dicho».
De forma sarcástica manifestó: «Casi no pude dormir de preocupación pensando que es la gran nota, pues no tiene nada».
En conferencia de prensa, el Mandatario federal aseguró que estaría preocupado si su gobierno ocultara cosas o si estuviera metidos en negocios, promoviendo la corrupción o violando derechos humanos.
Señaló que todos los días, las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y Marina (Semar) le envían reportes diarios y «me informan de todo».
«¿No le preocupa que se pueda dar a conocer información más delicada de seguridad nacional?», se le preguntó.
«No, porque todo está dicho. Acuérdense que nosotros informamos todos los días, aquí viene el secretario de la Defensa, el secretario de Marina, la secretaria de Seguridad Pública, cada mes; ademas, tenemos a casi todos los medios de malformación en contra, a grupos de intereses políticos, económicos, entonces qué vamos a estar preocupando por eso».