A las tortillas ya les empezaron a salir alas debido a que su precio ya se fue hasta los 20 pesos y más en varios establecimientos del ramo, puesto que no deja de subir la materia prima como el maíz, el gas y la energía eléctrica.
Héctor Pérez Santillán, presidente del Grupo de Industriales de la Masa y la Tortilla, aseguró que por cuestiones de sobrevivencia de las tortillerías es que la mayoría de los elaboradores del alimento se vieron obligados a aplicar un nuevo ajuste al precio del alimento, “pues con las alzas en los insumos no nos dejaron otro camino más que aumentar o cerrar”, dijo.
De esta manera, explicó que si bien es cierto que en algunas tortillerías todavía se puede conseguir la tortilla en 15 o 16 pesos el kilo, en otras se llegó a los 18 o 19 pesos y en algunas más el precio ya alcanzó e incluso superó los 20 pesos por kilogramo, además está latente la posibilidad de que todavía se siga encareciendo este que es un alimento básico en el comedor de todas las familias.
El dirigente de los industriales del ramo justificó el nuevo ajuste en el precio de la tortilla al señalar que recientemente se aplicó un aumento del 40% al costo del maíz, al pasar de los 5,800 pesos a los 8,700 pesos la tonelada, así como en el incremento del 30% en la harina de maíz que subió de los 11,500 a los 13,800 pesos, mientras que el precio de las refacciones de los equipos (tortilladoras) se encareció 40% y lo mismo sucedió con la mano de obra, pues los técnicos ya cobran un ojo de la cara “por darle mantenimiento o por arreglar los fierros”, indicó.
Sostuvo que, por si fuera poco, el gas también está subiendo constantemente de precio y ocurre lo mismo con la energía eléctrica, pues aunque las autoridades dicen lo contrario, no ha dejado de subir la luz, todo lo cual está incidiendo en que se disparen en forma exponencial los costos de producción en los establecimientos elaboradores de la tortilla.
“Con tantos y tan desproporcionados aumentos en los insumos que se utilizan para la elaboración de la tortilla, ahora somos nosotros los que le pedimos a la Procuraduría Federal del Consumidor que ya se ponga a trabajar y que le dé su arregladita a los proveedores de maíz y de la harina, pues son ellos los principales causantes del encarecimiento de la tortilla en perjuicio de la población”, concluyó.