El grupo chií libanés Hizbulá reivindicó este sábado siete ataques con artillería, proyectiles y drones contra posiciones israelíes en la frontera común, en represalia por ataques y bombardeos israelíes contra localidades del sur del Líbano.
En un comunicado, el grupo chií dijo que sus combatientes atacaron un edificio donde se encontraban soldados israelíes en el asentamiento de Metula en respuesta a «los ataques israelíes contra los civiles en las aldeas y casas del sur, especialmente en Tayr Harfa».
Hizbulá afirmó también, en una serie de comunicados posteriores, que atacó posiciones israelíes «con misiles directos y guiados», «artillería» o «armas apropiadas» en Ramia, Jal al Alam y Al-Samaq.
Otros dos ataques tuvieron como blanco Ruwaisat al Qarn, en las ocupadas libanesas Granjas de Chebaa, y la base militar de Beit Hilal, con «misiles» y «drones», respectivamente, y ambos «con impacto directo», según sendos comunicados de Hizbulá, en los que no informó de víctimas.
Israel y Hizbulá llevan siete meses enzarzadas en su peor fuego cruzado desde el conflicto que libraron en 2006, un estallido de violencia que se desarrolla en el marco de la guerra de Gaza y que ha disparado los miedos a que el Líbano se convierta en un segundo frente de la misma.