México, 13 sep (EFE).- Las autoridades mexicanas interceptaron a 45 migrantes que viajaban en condiciones de hacinamiento dentro de un camión por el oriental estado de Veracruz, informó este viernes la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
«En una carretera del estado de Veracruz, elementos de la Policía Federal auxiliaron a 45 migrantes de origen centroamericano que eran trasladados en condiciones de hacinamiento y con signos de deshidratación en el área de carga de una camioneta», indicó la SSPC en un boletín.
Según el organismo, el suceso tuvo lugar un tramo de la carretera Nuevo Teapa-Cosoleacaque, cuando los agentes federales al desempeñar sus funciones de seguridad y vigilancia «le marcaron el alto a una camioneta para una revisión de rutina».
Al ser abordados por los oficiales, el conductor y su acompañante no presentaron documentos con los cuales se pudieran identificar.
«Por lo que al realizar una inspección más exhaustiva a la unidad detectaron que en la parte destinada para la carga viajaban extranjeros junto con menores de edad, originarios de El Salvador, Guatemala y Honduras», indicó el boletín.
Los migrantes fueron trasladados a las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) para poder recibir atención consular y tras el reconocimiento de su nacionalidad se les otorgue el retorno asistido.
En tanto, el chófer y su acompañante quedaron a disposición del Agente del Ministerio Público Federal.
La migración aumentó en México desde octubre de 2018, cuando caravanas con miles de migrantes, en su mayoría centroamericanos, comenzaron a ingresar al país para llegar a Estados Unidos.
A inicios de junio, Estados Unidos y México llegaron a un acuerdo migratorio que evitó que el primer país impusiera aranceles a todos los productos provenientes del segundo.
A raíz de ello, México envió a las fronteras norte y sur a la Guardia Nacional -un nuevo cuerpo de seguridad impulsado por el Ejecutivo- y se contrató a más personal migratorio.
Esta semana, el Gobierno de México y el de Estados Unidos se reunieron en Washington para evaluar los avances en control migratorio tras el acuerdo. De acuerdo con México, el flujo se redujo en un 58,7 %, cancelando la amenaza arancelaria.