México, 3 mar (EFE).- Alfonso Romo, jefe de oficina de la Presidencia mexicana, negó este martes ser responsable de un conflicto de interés o ambiental tras una investigación periodística internacional que lo acusa de irregularidades y de dañar un acuífero con sus negocios privados en Yucatán, en el sureste del país.
Al descartar su renuncia, el funcionario defendió el trabajo de la empresa de fertilizantes Enerall, que fundó y lideró hasta que asumió su cargo actual, al argumentar que ha permitido mejorar la agricultura de la zona, ayudar a pequeños campesinos y darle valor al suelo.
«Si eso no es crear riqueza, si eso no es revolucionar el campo, no es combatir la pobreza en México, ¿entonces qué es? Entonces no voy a renunciar, al contrario, estoy sumamente orgulloso con lo que hice. Ya no soy accionista, desde el 2017 o 18», aseveró en rueda de prensa en el Palacio Nacional.
La investigación de CONNECTAS, Aristegui Noticias, Proceso, Ruido en la Red, Univisión, Vice en Español y el International Center for Journalists (ICFJ) reveló este lunes que Romo fundó en 2007 la compañía Enerall, investigada por destruir un pozo de agua dulce, conocido como cenote, en la península de Yucatán.
Aunque la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) indagó en abril de 2018 el megaproyecto, donde encontró un cenote de 5.500 metros cuadrados tapado con rocas y convertido en fango, no denunció el caso a la Fiscalía, sino que cerró el expediente con una multa y la clausura temporal del terreno.
El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió unas horas antes a su jefe de gabinete, a quien calificó de «gente de bien» víctima de una campaña mediática por apoyar su candidatura.
«Le agradezco mucho a Alfonso Romo. Eso es lo que le da mucho coraje a los conservadores. Cómo un empresario decide, en los tiempos en que nosotros estábamos marginados completamente, apoyarnos. Les molesta mucho eso. Ahora varios medios de comunicación se unen (en su contra)», manifestó el mandatario.
Aun así, López Obrador aseguró que encargará a la Secretaría de Medioambiente y Recursos Naturales (Semarnat) una investigación sobre lo sucedido, pero Romo descartó separarse de su cargo mientras ocurre la presunta indagatoria.
Aseveró que la concesión es de solo 12.000 hectáreas y representa apenas el 0,4 % de los permisos de la región.
«Hemos tenido revisiones de todos. Nunca hemos tenido problemas, salvo por una discusión con Profepa. Tenemos ocho cenotes en custodia», justificó.
Como prueba de su permanencia en el Gobierno, Romo anunció el fortalecimiento del recién creado gabinete para el crecimiento económico, que él dirige.
Al equipo se incorporarán Adalberto Palma, hasta ahora titular de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), y Eugenio Nájera, quien dirigía Nacional Financiera (Nafin).
Juan Pablo Graf, actual titular de la Unidad de Banca, Valores y Ahorro, será el nuevo hombre a la cabeza de la CNBV, y Carlos Noriega estará al frente de Nafin.