México, 29 sep (EFE).- Un juez federal vinculó este martes a proceso por el delito de delincuencia organizada a un sujeto implicado en la masacre de nueve integrantes (tres mujeres y seis niños) de una comunidad mormona, el 4 de noviembre de 2019 en el municipio de Bavispe, estado de Sonora, noroeste de México.
Mediante un comunicado, la Fiscalía General de la República (FGR) de México informó que, a través de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), obtuvo la vinculación a proceso en contra de Jesús «P» (Parra Rentería).
Esto «por su probable responsabilidad en el delito de delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud».
La Fiscalía recordó que el 5 noviembre de 2019, un día después de la matanza, se inició una investigación por los delitos de delincuencia organizada con la finalidad de perseguir el acopio y tráfico de armas.
En mayo pasado un juez autorizó la intervención de comunicaciones telefónicas, lo que permitió a la FGR identificar la participación de Jesús Parra en el grupo criminal de La Línea.
Parra fue detenido en un enfrentamiento armado con autoridades estatales y el Ejército en la Sierra de Casas Grandes, en el norteño estado de Chihuahua.
La Fiscalía señaló que el 17 de septiembre de 2020, a través de videoconferencia, se llevó a cabo comparecencia del detenido, quien se encontraba bajo reclusión en el Centro de Reinserción Social Número 5, en Casas Grandes, Chihuahua.
Aquel día, la FGR solicitó su vinculación a proceso por el delito de delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud, sin embargo, la defensa del imputado solicitó la duplicidad del término para que se resolviera su situación jurídica.
Posteriormente, en continuación de audiencia, se dictó dicha vinculación por el delito referido, toda vez que de los datos de prueba expuestos por la FGR ante dicho órgano jurisdiccional, el juez decretó que este sujeto «es presunto participante con funciones de dirección dentro de una organización delictiva».
El juez otorgó cuatro meses para la investigación complementaria y se ratificó la prisión preventiva oficiosa en el Centro de Reinserción Social Número 5, en Casas Grandes, Chihuahua.
El 4 de noviembre un comando de sicarios acribilló con armas de grueso calibre a tres camionetas de las familias Langford, Miller y LeBarón en la comunidad mormona de Bavispe, estado de Sonora, frontera con Estados Unidos.
El saldo de la masacre fue nueve muertos, entre ellos seis niños, además de cinco niños heridos que fueron llevados al Diamond Children Hospital de Tucson, Arizona, EE.UU.
A comienzos del año, Julián y Adrián LeBarón, miembros de una de las familias mormonas víctimas de la masacre, aseguraron a medios que existen «alrededor de 40» implicados en la matanza, la mayoría identificados por su apodo.