CIUDAD DE MÉXICO, octubre 12 (EL UNIVERSAL).- Khloé Kardashian sorprendió con la noticia de que recientemente fue diagnosticada con melanoma, un tipo de cáncer en la piel, inusual en personas jóvenes, sin embargo, la estrella de los realitys ya fue sometida a una cirugía en la que expertos extirparon el tumor que, a simple vista, parecía ser sólo una espinilla.
Pese a que la noticia de que «Koko» había sido diagnosticada con cáncer de piel alertó a sus seguidores, también causó gran alivio que, al momento en que la empresaria habló de su estado de salud, ya se encontraba recuperada de la intervención quirúrgica a cargo de especialistas de la Clínica de Cleveland, considerado uno de los mejores hospitales de Estados Unidos.
El día de ayer, Khloé recurrió a sus redes sociales para compartir con sus fans este episodio de su vida, el cual comenzó cuando se percató de que le había crecido un «pequeño bulto» en una de sus mejillas que, en principio, creyó que se trataba de una espinilla que terminaría por irse tarde o temprano, pero luego de siete meses la protuberancia continuaba ahí.
De esa manera, la celebridad acudió a expertos, quienes decidieron llevar a cabo un estudio, en el que confirmaron lo que temían, Kardashian tenía melanoma, un tipo de cáncer raro, ya que de acuerdo con el centro médico donde fue atendida, es responsable del 1% de los casos de cáncer en la piel.
Otro de los aspectos inusuales en este diagnóstico es que, habitualmente, el cáncer en la piel se desarrolla en personas mayores de 60 años y, aunque el melanoma es poco común, tiene un grado de letalidad muy alto pues –según el sitio web de la Clínica de Cleveland- es potencialmente mortal en las y los pacientes que no son diagnosticados oportunamente.
Sin embargo, si el melanoma es detectado a tiempo puede tratarse con facilidad, como ocurrió en el caso de Khloé que, luego de que los doctores le dieran la noticia, le recomendaron someterse a una biopsia de forma inmediata para, de esa manera, extirparan el tejido canceroso que tenía en la parte inferior de la mejilla.
Luego del proceso, el tejido extirpado fue puesto a revisión para que los especialistas se cercioraran de que no contuviera células cancerosas que pudiera haberse extendido a otras partes del cuerpo, pues este puede propagarse a zonas como los ojos y órganos internos.
La celebridad de 38 años ya se encuentra recuperándose, sin embargo, el cáncer es una enfermedad que la ha acompañado a lo largo de su vida, pues no es la primera vez que los doctores le expresan que es una paciente potencial para ser diagnosticada con esta condición o, al menos, así no han dejado entrever en el reality show de su familia «Keeping up with the Kardashians».
El temor de «Koko» de contraer esta enfermedad, en el pasado, ha sido evidente, pues su abuela Mary Jo «MJ» Campbell se enfrentó al cáncer en dos ocasiones, venciéndolo exitosamente, y su padre, Robert Kardashian, murió de cáncer de esófago a los 59 años.
Por ello, en una ocasión, su madre, Kris Jenner la persuadió hasta convencerla de realizarse unos estudios que detectaban la presencia del gen BRCA1, el cual, controla el proceso de reparación del ADN, pero de contar con una mutación, este mismo gen podría aumentar la probabilidad de que crezca un tumor.
En esa ocasión, los exámenes de sangre de Khloé, como el de todas sus hermanas, tuvieron resultados positivos y el doctor Paul Nassif descartó la posibilidad de que alguna de ellas padeciera cáncer en el futuro.