Lima, 6 jul (EFE).- Los países de la Alianza del Pacífico le declararon formalmente este sábado la guerra al plástico de uso único y prometieron impulsar y dar «atención coordinada y efectiva» a la lucha contra la contaminación y en favor del reciclaje y la economía circular.
Así lo recoge una declaración presidencial firmada en Lima por los presidentes del bloque formado por Chile, Colombia, México y Perú al cierre de su XIV Cumbre presidencial, que reafirma el compromiso de cumplir con la Agenda 2030 de Naciones Unidas y sus los Objetivos de Desarrollo Sostenible alineada a la visión estratégica de la Alianza y que pasa por el control de los residuos.
Así, los presidentes declararon su preocupación ante «la creciente generación, dispersión y acumulación en el medioambiente de los residuos de plásticos y microplásticos» y su disposición para prevenir «los impactos negativos» que causan «sobre todos los ecosistemas, incluyendo los marinos».
En ese sentido, la Alianza del Pacífico apostará por «desarrollar e implementar» políticas y estrategias «globales, regionales, nacionales y locales» para promover la gestión integral de los plásticos a lo largo de su ciclo de vida, reducir su uso y presencia y «avanzar hacia una economía circular».
El ministro colombiano de Medio Ambiente, Ricardo Lozano, resaltó en una declaración ante la prensa antes de dar a conocer el documento que, con esta declaración, el bloque «da ejemplo a la humanidad» sobre cómo afrontar las amenazas medioambientales.
«Es muy importante resaltar. Ahora juntos, México, Chile, Perú y Colombia, y ahora con Ecuador, nos integramos en esa agenda de equidad, y de responsabilidad del consumidor, del uso mismo de los plásticos, de ser más conscientes de lo que hacemos en el océano, de lo que hacemos en nuestras casas, de lo que se hace en los suelos, los ecosistemas compartidos (…), por eso esta declaración», dijo.
Los países de la Alianza apuntaron así impulsar también «soluciones innovadoras» para regular la producción y el consumo del plástico y crear «políticas públicas regionales, nacionales y locales» para fomentar el respeto por la naturaleza y «transformar los valores y prácticas».
Como aplicaciones prácticas de este acuerdo, la Alianza apunto a tomar acciones que «desincentiven la demanda y el uso» de plásticos de un solo uso, limitar o prohibir el ingreso de productos de este material en áreas naturales protegidas y promocionar la investigación y la innovación en la industria para desarrollar «alternativas más sostenibles».
La producción y uso racional de productos reutilizables, reciclables y que no generen contaminación, generar regulaciones para reducir la contaminación, fortalecer la sensibilización y educación para promover el manejo responsable de productos de plástico serán otras políticas impulsadas por la Alianza.