Guadalajara (México), 5 ago (EFE).- La mexicana Mariana Arceo, campeona panamericana de pentatlón moderno, reveló este miércoles que a un año de competir en los Juegos Olímpicos de Tokio trabaja paso a paso, confiada en involucrarse en la disputa de las medallas.
«El viernes 6 de agosto alrededor de 13 competidoras, o quizás más estaremos entre las aspirantes a estar entre las tres primeras; tengo un buena base, pero no me quiero adelantar porque la situación es incierta por la COVID-19», aseguró a EFE este miércoles.
La deportista de 26 años fue la primera atleta olímpica de México contagiada de coronavirus, pero después de 40 días de recuperación y un mes para rehabilitarse, lleva varias semanas entrenándose bien en Guadalajara, occidente del país, lo cual le da devuelto la confianza.
Considerada con potencial para nadar los 200 metros en alrededor de 2:06 minutos, con un elevado nivel en la competición de esgrima, precisa en la de tiro y con buen cierre en la carrera, la incertidumbre de Arceo para Tokio 2020 gira en torneo al concurso de equitación, que, según cree, marcará su destino olímpico.
«Es una prueba azarosa, se necesita estabilidad sicólogica, no tener miedo y ser arriesgada; conoces al animal 20 minutos antes de montarlo y aunque me encantan los caballos, no hay tiempo para establecer lazos afectivos», confesó.
Según la número uno de América, la estrategia en Tokio será comunicarse con el caballo y hacerle ver que cada uno debe hacer su trabajo, pero sin frases de cariño porque no es posible crear una empatía en pocos minutos.
«El caballo está entrenado para eso. Uno debe guiarlo para hacer una competencia limpia, que sepa que está ahí para trabajar», agregó
Mariana está consciente de que la competición de pentatlón que empezará el 5 de agosto y concluirá un día después, será de las más impredecibles de los Olímpicos de Tokio y habrá poco margen de error porque si bien hay poco más de una decena de candidatas a medallas, otras puede colocarse en el podio.
«En Río 2016 la australiana Chloe Esposito estaba alrededor del lugar 118 del ránking mundial y ganó la medalla de oro y en hombres el mexicano Ismael Hernández llegó a los Juegos como en el sitio 70 de la lista mundial y conquistó el bronce; son dos ejemplos de cómo va este deporte en unos Olímpicos», explicó.
Arceo se entrena con restricciones por la pandemia, pero ha mejorado su forma deportiva. Este mes comenzará a trabajar el hipismo y tratará de mantener equilibrio en las cinco pruebas de su deporte.
Confiesa que el día antes suele comer carbohidratos, como es costumbre en todos los competidores de deportes de resistencia, pero la mañana antes de la competencia desayuna ligero, siempre con pan, para no correr riesgos de una mala digestión. Es un ritual que seguirá en Tokio, aunque no se extiende sobre el tema.
«Me concentro en el día a día, aunque el sueño olímpico está», concluyó.