La cuesta de enero es una temporada bastante complicada, pero la del 2024 no será tanto como la del año pasado, donde la inflación estuvo presionando de manera importante a la economía, y se podrá estar saliendo del declive hasta el mes de marzo, manifestó la presidenta del Colegio de Economistas de Aguascalientes, Dafne Viramontes Ornelas, durante el programa de INFOLÍNEA con Lucero Álvarez.
Explicó que en la cuesta de enero se combinan los siguientes factores: el gasto se realiza los últimos meses del año pasado, los ajustes de los bienes y servicios, los cobros de impuestos y cortes de las tarjetas de crédito.
Aunque el grueso de la población no percibe la reducción de la inflación en sus bolsillos, ya que los precios de los productos que se consumen con frecuencia como los alimentos, bebidas, tabaco, servicio educativo y bienes como la vivienda, no se han reducido de manera importante.
Mencionó que los energéticos no están incrementando de manera importante como se cree, ya que en noviembre hubo una reducción en el gas natural, electricidad, gas LP. Pero se debe estar pendiente en los precios de los productos de uso cotidiano como las frutas, verduras, alimentos, bebidas y tabaco, porque suelen aumentar durante el mes de enero, además habrá incrementos en los servicios que presta el Gobierno como el predial.
En alimentos, bebidas y tabaco se cerraba en el pasado mes de noviembre con una inflación del 5.33%, en mercancías no alimenticias con el 6.78%, en vivienda con el 5.28, en colegiaturas con 3.74 y otros servicios con el 6.6%, sobre todo lo referente con el sector médico.
A principio de cada año las empresas realizan sus ajustes en base a la inflación, es decir aumentarán los precios de sus servicios a inicio de año, aunque existen algunas que suelen incrementar muy por encima de ese porcentaje, lo que se debiera estarse regulando para evitar abusos.
Por lo anterior la economista señaló que dicho factor se ha reducido de manera importante durante los últimos meses del año pasado, ya que en un inicio fue del 8% y cerró en 4.32%, “en términos de inflación nos encontramos mejor, gracias a las políticas públicas que ha implementado el Banco de México de aumentar las tasas de interés”.
Por otro lado, Viramontes Ornelas dijo que el alza del salario mínimo es positivo aunque beneficia a un grupo reducido de la población, ya que son las que se encuentran contratadas en el mercado formal, que tienen acceso a prestaciones sociales, por lo que los patrones tienen la obligación.
Y concluyó que desafortunadamente no todas las personas se verán beneficiadas con el incremento del salario mínimo y resultarán perjudicadas, porque las empresas toman como base dichos aumentos para subir sus productos o servicios.