Ciudad de México – La economía de México creció un 0,1 % en el segundo trimestre de 2019 frente al periodo enero-marzo, lo que aleja la posibilidad de una recesión, según cifras preliminares y ajustadas por estacionalidad divulgadas este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En el segundo trimestre, las actividades terciarias avanzaron 0,2 %, mientras que las secundarias se mantuvieron invariables y las primarias disminuyeron un 3,4 %, de acuerdo con cifras desestacionalizadas (sin factores coyunturales por temporada), señaló el organismo en un comunicado.
En el primer trimestre del año, el PIB se redujo un 0,2 % frente al trimestre anterior y si se hubiera producido otra contracción en el segundo, México hubiera entrado en recesión, algo que ya daban por hecho decenas de instituciones financieras.
No obstante, en cifras originales, el PIB cayó un 0,7 % en el segundo trimestre de 2019 respecto al mismo período del año anterior.
El decrecimiento del PIB se debió a la caída del sector secundario (2,8 %) contrarrestada parcialmente por el alza del sector primario (1,4 %) y del terciario (0,1 %), respecto al periodo abril-junio de 2018.
La caída del 0,7 % en cifras originales supone la primera vez desde 2016, cuando empieza el recuento ofrecido hoy por el Inegi, en que un trimestre cierra con un resultado rojo si se compara con el mismo periodo del año anterior.
A pesar de estas cifras, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirma que la economía crecerá del país un 2 % este año y un 4 % en promedio anual durante su mandato, que concluiría en 2024.
No obstante, la mayoría de analistas han reducido las perspectivas económicas para México a lo largo del año y actualmente sitúan el crecimiento para 2019 en torno al 1 %.
La pasada semana, el Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó a 0,9 % la estimación de crecimiento para este año.
El Gobierno mexicano anunció este lunes un plan para movilizar 485.000 millones de pesos (25.424 millones de dólares) para apoyar la economía e incentivar el consumo, una decisión que fue bien vista por buena parte del empresariado.